Mayor conciencia con nuestra tierra
La celebración pasó un tanto inadvertida, salvo los escolares que pudieron enterarse de cómo ir al rescate de ella.
Todos tenemos un papel importante en tareas como enfrentar el calentamiento global y así preservar el planeta para las presentes y futuras generaciones.
Principalmente establecimientos educacionales celebraron el martes el Día de la Tierra, pero para el resto de la comunidad pasó una tanto inadvertida esta fecha que busca fomentar el desarrollo de la humanidad pero en forma sustentable, sin dañar el planeta.
Esta actividad que se realiza desde hace 44 años, nos lleva a reflexionar sobre los pocos cuidados que tenemos con el lugar donde habitamos y cómo lo hemos ido dañando casi imperceptiblemente. En la actualidad ya se aprecian los daños, como el que sufre la capa de ozono, y que en varias partes de nuestro país nos tiene expuestos a rayos solares que son la causa de muchos cánceres a la piel.
Respecto a la tierra en que vivimos, los loínos aún tenemos muchos que aprender y sobre todo, a tener conciencia de lo frágil que es nuestra hábitat y cómo puede sufrir graves efectos productos de nuestras acciones productivas, sanitarias, extractivas o de consumo desmedido.
Muchos creen que aún estamos a tiempo de revertir aquellos efectos que se están produciendo en nuestra tierra, como el cambio climático.
Pero para ello, debemos realizar acciones y adquirir hábitos de sustentabilidad. Un ejemplo claro es el excesivo uso de bolsas plásticas, cuando la tendencia mundial es eliminarlas.
Los acuerdos de producción limpia para reducir las emisiones de carbono es un paso importante que se está dando en diferentes sectores. Y la minería debiera sumarse a ella.
Hay mucho trabajo por hacer, para construir un país sustentable que aporte en esta tarea de proteger y velar por nuestra tierra.
De allí la importancia de que todos tengamos en claro que es nuestro deber aportar para cuidarla, con actos tan simple como cuidando el agua potable, o usando menos energía eléctrica.
En definitiva, tanto el sector público como privado, y cada uno de nosotros como ciudadanos debemos hacer un aporte o inversión para mitigar el daño a nuestro ambiente y reducir las emisiones de gases que provocan el efecto invernadero.