Freno a conductores que rompen reglas
La conducción debiera ser como un acuerdo de caballeros, se respeta y se cumple aunque no nos estén vigilando. Pero no ha sido la actitud de miles de personas que tienen una licencia de conducir y que se creen con el derecho de hacer lo que les plazca y literalmente se echan al bolsillo la ley de tránsito.
El Gobierno ha dado un paso trascendente para poner un primer freno a conductores irresponsables que sin pensar en las consecuencias se suben a un vehículo habiendo excedido el límite de alcohol permitido.
Por años estos verdaderos 'delincuentes del volante' quedaron impunes a sus graves falta, porque no había una legislación que los castigara. Así fuimos conociendo penosas historias de familias que perdieron a sus seres queridos por un conductor que lo hacía bajo la influencia del alcohol y que obviamente no pudo reaccionar para haber evitado la tragedia. Muchos escaparon, otros contrataron buenos abogados y quedaron libres. Nunca se escuchó de alguno que acudiera donde las familias de la víctima para intentar resarcir el daño causado.
Hoy, la justicia se hará cargo de ellos, porque seguirán apareciendo conductores con diferentes grados de alcohol en la sangre que provocarán alguna tragedia en calles o carreteras de nuestro país. Pero ahora deberán pagar con cárcel efectiva desde tres años, perder el vehículo y ser sancionados con inhabilidad permanente para conducir, entre otras sanciones.
Muchos debieron morir inocentemente para poder recién conseguir esta denominada 'Ley Emilia', en honor a Emilia Silva Figueroa de nueve meses que murió en enero del años pasado, cuando viajaba en coche con sus padres y su auto fue impactado por el vehículo que conducía un hombre cuya alcoholemia arrojó 2.05 g/l en la sangre.
Así como esta ley, faltan muchas más -y mejorar otras- para hacer realmente justicia en tantas situaciones que vemos que ocurren en nuestro país, donde se puede defraudar, burlar, engañar, sin recibir la mínima sanción.