Definitivo: Estadio no está listo y el partido se jugará en el 'Luis Becerra'
reestreno. Aún hay problemas en los baños y en la seguridad. Cobreloa cree que es "falta de voluntad política" por parte de autoridades que manejan este tema en la capital del país.
Parece un cuento de nunca acabar, pues todo apuntaba a que el remozado Estadio Municipal de Calama sería reestrenado con el partido que deben jugar este próximo jueves los elencos de Cobreloa y O'Higgins, sin embargo, por problemas en los baños y en la seguridad, ya es un hecho que los loínos verán nuevamente postergado el sueño de por fin poder utilizar el moderno recinto.
La dificultad puntual de los baños es que hay que ir regulando, pieza por pieza, todos los artefactos de los servicios higiénicos, los que suman 342, entre lavamanos, tazas de baño y duchas. "Uno abre la llave en los lavamanos y en algunos sale agua y en otros no. En otros sale poca agua y también hay algunos en que sale agua y luego uno la cierra y sigue largando el chorro. También, hay filtraciones", mencionó el gobernador Claudio Lagos.
Estos detalles se deben revisar pieza por pieza. Y, la empresa que estaba a cargo de los trabajos en el recinto había contratado un solo gásfiter, lo que hacía imposible que terminara, por la premura que se requería.
"Ahora, hay un buen contingente de gásfiters, son 15, pero no existe la certeza de que alcancemos a llegar al día jueves, para que no existan eventualidades sanitarias", expresó la máxima autoridad provincial.
El tema de los servicios higiénicos a medio terminar no es el único punto en contra que presenta el recinto. Carabineros de El Loa rechazó el informe de seguridad que entregó Cobreloa, argumentando que éste está firmado por un jefe de seguridad que no está reconocido por la policía uniformada.
Carabineros de El Loa debía visar el informe que presentara el elenco minero loíno y recién ahí vendría un equipo especializado de Carabineros desde Santiago, llamado OS-5, quien al final tendría la última palabra respecto a la posibilidad de recibir un partido calificado como "clase B". Al haber sido rechazado el escrito, supone un retraso también en el arribo a Calama del OS-5, el que se producirá en una fecha aún no determinada, cuando Cobreloa entregue los papeles con las firmas que corresponden.
Respecto de aquello, el gobernador Lagos, el viernes pasado, confiaba en que el OS-5 llegara a Calama hoy y, de no ser así, solicitaría a la prefectura El Loa de Carabineros que permitiera jugar un partido en el nuevo estadio, prometiendo que se solucionaría a la brevedad la altura de las rejas. Ése es otro problema del recinto.
Aquella gestión, si es que alguna vez se hizo, no arrojó resultados positivos y ya lo había esbozado hace algunos días el prefecto de El Loa, Jorge Tobar, quien manifestó que "Carabineros entrega una visión técnica del asunto y lo que se busca es que la gente de Calama asista a un recinto donde se garantice su seguridad. No se trata de poner trabas".
cobreloa
En Cobreloa, recibieron con muchísima molestia esta nueva postergación del reestreno del Estadio Municipal. Fue específicamente el presidente de la Comisión Fútbol de Cobreloa, Sebastián Vivaldi, quien disparó en contra de las autoridades políticas de gobierno, que toman determinaciones desde Santiago.
"No sé cuál será la persecución tan grande que tienen en contra de Calama. Están buscando cualquier artimaña para no entregar el estadio. Si éste es un tema político. Están esperando que Michelle Bachelet venga a inaugurar el aeropuerto y el estadio. Le han echado la culpa a los baños, que hay una llave mala, que la luz", se quejó Vivaldi.
Al respecto, mencionó que existen mayores exigencias con Calama y el nuevo estadio en comparación con otros recintos deportivos del país. "Ayer (sábado), Cobreloa jugó en Yumbel y había un baño y baños químicos. La galería se caía sola. Eso explica que lo que está sucediendo es increíble. Ese estadio está habilitado por Carabineros y Estadio Seguro. Entonces, nadie entiende nada. Creerán que como Calama no tiene mar, somos bolivianos y no podemos usar nuestro estadio. Yo creo que por ahí va la cosa", manifestó molesto el dirigente de Cobreloa.
El gobernador dijo respecto de esta apreciación de Vivaldi que "creo que no se puede comparar. Acá estamos hablando de un estadio nuevo. Las autoridades del nivel central quieren tener un estadio como se lo merece Calama y no algo a medias"
Sebastián Vivaldi agregó que no comprendía cómo no se aceptó por parte de Carabineros el informe que ellos proporcionaron sobre el nuevo recinto y sí se visó en su momento el estadio "Luis Becerra Constanzo".
"Tendríamos que ser los imbéciles más grandes para haber entregado una presentación mala del estadio nuevo, después que nos aceptaron la del "Luis Becerra", que es un recinto que cuenta con muchas más precariedades, diez veces más, te diría. Éste es un asunto netamente político, que se está fraguando desde Santiago. A la ministra del Deporte (Natalia Riffo) ¿crees que le preocupa que juegue Cobreloa con O'Higgins? Le da lo mismo. Ellos acomodan sus tiempos", aseguró.
En cuanto a la labor de las autoridades locales, Sebastián Vivaldi, cree que ellos "lo están haciendo bien. El gobernador (Claudio Lagos), por mejores intenciones que tenga, es mandado por la gente de Santiago. Lo manda la Presidenta (Bachelet), qué peso puede tener. Lo mismo con la ministra del Deporte, si ella dice no, es no. Calama, lamentablemente siempre ha sido mal mirada, como una ciudad estorbo y ésta es una ocasión más nomás. Qué le vamos a hacer".
Claudio Lagos, a modo de autocrítica, mencionó que la desvinculación con la empresa que estaba a cargo de las labores de construcción del recinto deportivo debió haber sido más rápida (se cortó el contrato hace apenas 75 días). "Desde el IND hubo retrasos que le costaron la salida al director regional. Eso no fue casual. Le costó la cabeza al director regional del IND. Estábamos un poquito lejos y eso ocurre cuando se maneja desde Santiago todo", argumentó Lagos.
Finalmente, llegó un comunicado de la Gobernación donde dice textual: "las distintas instituciones vinculadas al estadio, continúan trabajando fuertemente para poder entregar este importante recinto en el corto plazo". No se sabe qué es corto plazo, cuando se habla de un estadio con capacidad para apenas 12 mil espectadores, que lleva más de dos años construyéndose. Una total incógnita.