Cobreloa entrenó en nuevo estadio y generó polémica
molestia. El elenco minero no le pidió autorización al canchero Patricio Bustamante, quien afirmó que "no se debió usar luego de dos días de lluvia".
Ayer el cuerpo técnico de Cobreloa decidió entrenar, pese a que sólo hace horas se había terminado la lluvia en la capital provincial de El Loa.
Aquello no supone mayor novedad, pues es una determinación de Figueroa, quien está preocupado por el rendimiento del cuadro loíno y no quiere perder tiempo. Sin embargo, todo cambia si ese entrenamiento finalmente se realizó en el césped de nuevo estadio Zorros del Desierto.
Es complejo, porque posterior a una lluvia la cancha se supone que queda blanda, aún sin que nadie juegue sobre ella. Ahora, si se oficia una práctica ahí, el deterioro que puede sufrir el césped es casi seguro.
Al menos así lo analizó uno que conoce de sobra el tema, el encargado de la cancha, Patricio Bustamante, quien manifestó que "me sorprendí en la mañana (ayer), porque cuando llegué a la cancha, Patricio Roco me informó que Cobreloa iría a entrenar hoy (ayer) y mañana (hoy) ahí. Entonces, le dije que quién había autorizado para hacer uso de la cancha, cuando veníamos de dos días de lluvia. Le pedí que me dijera qué funcionario del municipio le había dicho y me dijo que 'no, que eso lo había visto Rodolfo Larraín' y le manifesté que yo no me haría responsable", alegó el canchero en conversación con el programa radial En La Línea.
Posteriormente, Bustamante aseguró que a raíz de esta situación, él ya no se haría cargo más del cuidado de la cancha.
"Es segunda vez que pasa esto y nadie se hace responsable de nada. Después me comunicó con el municipio y ellos me dicen que no existía autorización para ocupar la cancha hoy (ayer). Sí existe autorización para usar la cancha una vez a la semana, pero tienen que tener la autorización mía y nadie me lo solicitó", argumentó el canchero loíno.
En tanto, Cobreloa, a través de su gerente técnico, Rodolfo Larraín, señaló que hace dos meses esta situación había quedado zanjada, cuando el municipio le arrendó el recinto al club minero loíno.
"En esa oportunidad (hace dos meses), le pregunté al alcalde Velásquez si podíamos hacer uso de las instalaciones del nuevo estadio y me respondió que inmediatamente... Hay un convenio, un contrato y no sé quién quiere evitar que Cobreloa entrene ahí, al menos no alguien que se haga llamar cobreloíno... La cancha no estaba dañada, sólo húmeda", cerró Larraín.