La audacia de los delincuentes calameños no tiene límites, tal como quedó reflejado la tarde del miércoles pasado en el robo a un almacén de la población 23 de Marzo, cuando un ladrón ingresó al local comercial atendido por su dueña haciéndose pasar por un cliente y solicitando varios productos alimenticios.
Cuando supuestamente iba a pagar, intimidó a la comerciante y a un cliente con un arma de fuego, para luego darse a la fuga del lugar con las especies avaluadas en 15 mil pesos. Todo el delito quedó grabado, debido a que el local cuenta con un sistema de televigilancia, pruebas que fueron entregadas a Carabineros para que puedan dar con responsable del ilícito.
Mano armada
Si bien el sector en donde confluyen las calles Tocopilla, Hurtado de Mendoza y la avenida Grecia es bastante conocido por los ciudadanos por su peligrosidad, sobre todo en las noches, debido a que en lugar hay siete locales de expendio de alcoholes y en sus inmediaciones se reúnen gran cantidad de delincuentes y drogadictos, quienes cometen diferentes tipos de ilícitos contra los transeúntes y los locales comerciales.
Uno de estos es el caso denunciado y que ocurrió cerca de las 17.30 horas del miércoles en el almacén de nombre "Virgen de Urkupiña", ubicado en la calle Tocopilla, el cual es atendido por su propia dueña.
La mujer de nacionalidad boliviana, realizaba sus labores habituales, cuando al local ingresó un hombre, quien simuló ser un cliente y comenzó a pedir diferentes productos alimenticios, cuando justo ingresó otro comprador.
Fue ese el momento el que aprovechó el ladrón para agarrar las bolsas con las mercaderías avaluadas en más de 15 mil pesos y extraer una pistola de entre sus vestimentas, con la cual intimidó a locataria y al otro cliente, señalando que trataba de un asalto, para luego darse a la fuga.
Las víctimas de delito intentaron alcanzarlo, pero no pudieron hacer nada, producto de que el antisocial se subió a un colectivo en la avenida Grecia y desapareció del sector.
La propietaria del local afectado, Alicia Nina, explicó que "ya es la tercera vez que nos pasa algo así y yo creo que esto se debe a las schoperías que hay alrededor. Entró como cualquier cliente y yo lo atendí. Después sacó el arma y salió del local, yo reaccioné para seguirlo, pero se fue".
Investigación
La comerciante se contactó con Carabineros, los que llegaron raudamente y tras constatar la veracidad del robo comenzaron con la investigación, debido a que todo el hecho delictual quedó registrado en las cámaras de seguridad con las que cuenta el almacén, donde se aprecia muy nítidamente el rostro del ladrón, quien se dio el tiempo de incluso mirar directamente al dispositivo de video, siendo el principal medio de prueba para inculpar al antisocial.
La afectada del robo indicó que es necesaria más presencia policial en el sector, con la finalidad de ahuyentar a los delincuentes y prevenir que ella y otras personas se conviertan en víctimas de delitos.