Nuevo movimiento político ya suma 250 adherentes en Calama
Motivos. Sus integrantes apelan a generar cambios profundos
Creado en septiembre del año 2014, el Movimiento Anti Corrupción es un colectivo que en Calama ya cuenta con 250 adherentes y en la búsqueda de más interesados en sumarse a sus filas, para ser un referente y denunciar las malas prácticas dentro de la actividad política.
Su presidente en Calama, Luis Campillay, comentó que "ante un panorama nacional de corrupción, la ciudad y sus autoridades no están ajenas a esta realidad. Hoy tenemos un hospital que no funciona como corresponde, un anexo que cuesta miles de millones de pesos para su funcionamiento, pero que no entrega la cobertura deseada. Tenemos el río contaminado, calidad de aire pésima, y ante todo autoridades ausentes y una población abandonada por éstas", explicó el dirigente.
A nivel país ya suma 10 mil personas que se han inscrito en las filas de este movimiento "y en el cual no hay políticos, sino más bien una fuerza ciudadana. Hace poco ya habilitamos una oficina donde trabajamos -con fondos propios- y hay en nuestra organización personas de todas las edades y que se han sumado a esta iniciativa", agregó Campillay.
Crítico en su análisis de la actividad política en general, "nuestra misión es crear un partido político anti corrupción y que acabe con las malas prácticas al interior de esta actividad", enfatizó Luis Campillay sobre su objetivo.
"En los últimos días hemos recibido llamados de centros de alumnos de diferentes liceos de Calama y eso nos ha llamado mucho la atención, porque conocen nuestra causa y saben que no tienen abanderados políticos y mucho menos ideologías que representen nuestro trabajo que está basado en la reflexión y un trabajo que pretendemos desarrollar con los más jóvenes", argumentó el líder de este movimiento.
Según Campillay la clave del éxito que esperan lograr en las demandas y el trabajo a promocionar "es clave la participación ciudadana. Sin política ni ideologías. Sólo socializando los intereses de una ciudad que no cuenta con el respeto que se merece y que tanto necesita para mejorar", cerró.
Este movimiento auto denominado Partido Anti Corrupción y cuyas siglas son PAC, "cuenta con el apoyo del mismo en Honduras y Costa Rica. Además tenemos una fuerte relación con el Sindicato Nacional de Trabajadores (Sinat). En PAC hay personas normales, trabajadoras, que quieren cambios profundos en la sociedad calameña", dijo Luis Campillay.