Colectivero fue asaltado con un arma blanca por tres ladrones
planificado. El delito fue cometido a eso de las 9 de la mañana de ayer en la villa Ayquina, luego que éstos simularan ser pasajeros, subiéndose en diferentes cuadras.
Un colectivero loíno de 50 años sufrió un robo con intimidación la mañana ayer cuando realizaba su habitual recorrido por el sector norte de Calama. Fueron tres ladrones, quienes se coludieron e idearon un plan para hacerse pasar por pasajeros y arrebatar la recaudación del trabajador.
Los antisociales, un hombre y una mujer de mediana edad, una vez en el vehículo intimidaron al conductor con un arma blanca y luego de apoderaron del dinero, el cual el trabajador de la locomoción colectiva lo utilizaría para pagar sus deudas, se dieron a la fuga del lugar.
Tras el hecho delictual, el afectado se dirigió hasta las dependencias de las 1ª Comisaría de Carabineros de Calama y le relató lo sucedido a los efectivos policiales, quienes ya investigan el ilícito.
Simulación
Según los antecedentes policiales del caso, el asalto a con arma blanca se produjo cerca de las 9 de la mañana del día de ayer, cuando el chofer de un colectivo marca Nissan modelo V16 cumplía su jornada laboral habitual.
Cuando el medio de transporte público circulaba por la villa Ayquina, más específicamente en la esquina de las calles Central Norte y Riquelme, fue detenido por una joven mujer quien se subió en el asiento de delantero, cancelando su pasaje como cualquier usuario.
Dos cuadras más allá, el vehículo fue detenido por dos hombres, los que abordaron el auto y se instalaron en los asientos traseros. Al llegar a la intersección de la avenida Granaderos con la calle Ascotán, le preguntaron al conductor si tenía vuelto de 20 mil pesos, a lo que respondió que sí.
Asalto
Cuando el colectivero sacaba un monedero donde tenía 300 mil pesos para pagar unas cuentas, la mujer que estaba en el asiento del copiloto se percata de la gran cantidad de dinero y grita: "ahora ya", momento en que sus cómplices inmovilizan al hombre y le colocan un cuchillo en el cuello, indicándole que se trataba de un asalto.
Fue ese el momento en que la líder de la agrupación delictual calameña aprovechó para arrebatarle la plata, además de apropiarse de las llaves del motorizado, para posteriormente bajarse del auto y antes de darse a la fuga del lugar con el botín, le devolvió la llave lanzándosela por los aires.
El trabajador de la locomoción colectiva todavía en estado de shock recogió las llaves del vehículo y se dirigió a la Primera Comisaría de Carabineros de Calama, donde les contó a los uniformados el delito del cual había sido víctima minutos antes, estampando la correspondiente denuncia para que se inicie una investigación policial y se dé con el paradero de los ladrones que le robaron una importante suma dinero, la cual había logrado reunir con extenuantes jornadas de trabajo a bordo del vehículo de la locomoción colectiva.