Karen Cereceda Ramos
El ambiente ayer en las dependencias del consulado de Bolivia en Calama era de tranquila alegría.
El cónsul, Severo Atahuichi junto a representantes de organizaciones de residentes bolivianos estaban reunidos desde las 6 de la mañana para presenciar la determinación de los jueces de La Haya.
La espera fue con todos reunidos alrededor de un escritorio en el hall del consulado, frente al televisor, compartiendo unos bocadillos y practicando el "acullico", nombre que se le da a la acción de masticar bolas de hojas de coca.
Pasado el mediodía y ya con los resultados que los favorecían, el máximo representante del gobierno de Bolivia en la ciudad, entregó sus comentarios y sentimientos tras la decisión de los jueces de la Corte Internacional de Justicia de la Haya (CIJ).
"Nuestro gobierno ha seguido los pasos que corresponden y solo quiero manifestar nuestra satisfacción. La emoción que sentimos todos los bolivianos y bolivianas lo tenemos guardado en nuestro corazón", dijo Atahuichi.
Señaló además que el Presidente de Bolivia, Evo Morales, "seguramente siente la misma satisfacción que nosotros".
Al consultarle sobre si cree que esta situación podría perjudicar las relaciones entre chilenos y bolivianos, el cónsul dijo que esa no es la intención de su país, sino que todo lo contrario. "La intención es integracionista, somos un país pacífico", señaló.
Residentes
"Para mí es una alegría inmensa haber escuchado el fallo favorable para Bolivia", dijo Maximiliano Calle, presidente del centro cultural de residentes bolivianos Alianza.
Calle fue uno de los bolivianos que llegó hasta el consulado de su país en Calama para escuchar la decisión de los jueces de la CIJ.
Dijo que ellos como bolivianos siempre han anhelado que sus demandas sean escuchadas en alguna instancia y dijo que la alegría era "tan grande que no tenemos palabras para poder expresarla".
Otro de los bolivianos que estuvo en el consulado fue Francisco Marín, presidente de la agrupación de residentes e inmigrantes, quien también manifestó su alegría por la decisión de los jueces de declararse competentes.
"Ya lo han dicho los compatriotas, los sentimientos lo llevamos en el corazón", comentó Marín, quien también agregó que ellos son creyentes de la Madre Tierra "y creo que la Madre Tierra va a hacer justicia con nosotros".
Tanto los residentes como el cónsul Severo Atahuichi coincidieron que están confiados en las próximas etapas que se vienen en la corte de justicia de la Haya.
Señalaron también que las relaciones entre ellos y los chilenos aquí en Calama continuarán, puesto que muchos de ellos han echado raíces en esta zona y que el aporte ha sido mutuo y satisfactorio.
"Nosotros somos creyentes, creemos en la Madre Tierra y creo que la Madre Tierra va hacer justicia".
Francisco Marín, Agrupación de residentes