Proteger la vida en vez de los bienes
El arriesgarse demasiado para evitar el robos de objetos puede ser una mala decisión que conviene analizar. El robo de vehículos en la ciudad, principalmente camionetas y todo terreno, siguen aumentando y es necesario tomar mayores precauciones.
La delincuencia está causando estragos, llevándose bienes que han costado a gran parte de la población toda una vida. Por esta razón, muchas personas, sin pensarlo dos veces, protegen con su vida los bienes, sin pensar en la familia y las consecuencias si algo sale mal.
Es así como muchas personas han muerto o han sufrido graves lesiones por defender algún bien, principalmente cuando se trata de vehículos.
Al respecto, es necesario que las familias puedan evaluar anticipadamente los riesgos en caso de oponerse a los delincuentes, de estar de acuerdo en cómo reaccionarán frente a un hecho de violencia y qué medidas adoptarán en caso de ser víctimas.
Cuando vemos que los delincuentes actúan cada vez con más violencia y sin ningún sentido de piedad, es necesario recapacitar sobre cómo hacer frente a la delincuencia.
Es necesario sopesar que es más valioso, o que pasaría si llegamos a perder la vida por defender unos celulares, televisores, notebook o un automóvil, por nombrar algunos.
El llamado es a la cordura, en medio de tanta insensatez y violencia, porque de lo contrario seremos víctimas de nuestras propias acciones al perder de vista el valor de nuestras vidas.
Debemos por todos los medios de no poner en riesgo a nuestra familia, que es lo más valioso que tenemos, de no hacer frente a los delincuentes, salvo que tengamos las herramientas como para torcerles la mano, y preferir que nos lleven nuestras pertenencias a que nos dejen mal heridos.
Además debemos se más cautelosos y anteponernos al actuar de los delincuentes para evitar cualquier riesgo, alertar a la policía antes de tomar la iniciativa, pedir ayuda a otros y no actuar solos, o evitar riesgos innecesarios.
Los bienes pueden recuperarse, pero la vida no. Procuremos actuar siempre correctamente, no vivir con miedo, pero si con precaución y no exponernos a riesgos innecesarios.
Habrá que seguir buscando la manera de derrotar a la delincuencia pero sin cometer acciones temerarias que no lograrán ningún resultado.