43 años | 2 de noviembre de 1972

Catástrofe económica en minerales de salitre

El senador Juan de Dios Carmona, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), denunció hoy que ya está totalmente fracasado el compromiso contraído por el Presidente Salvador Allende de hacer producir este año un millón de toneladas de salitre. El legislador nortino dijo que la industria salitrera exhibe una caótica situación.

33 años | 2 de noviembre de 1982

Triunfal recepción dio la hinchada a Cobreloa

"Cobreloa es la alegría no sólo del pueblo de Calama y Chuquicamata, sino de todo el norte grande, si le hacen esta manifestación al llegar, luego que perdió, piensa cómo habría sido el recibimiento de haber salido campeón de América", dijo el obispo de Calama. monseñor Juan Bautista Herrada, quien también llegó al aeropuerto.

16 años | 2 de noviembre de 1999

Codelco apoya declarar a Chuqui patrimonio

Su más in condicional a poyo entrega Codelco a todas aquellas iniciativas que permitan la preservación del patrimonio por lo cual se advierte muy alentadora la proposición que realizó el Sindicato Dos de Chuquicamata en cuanto a que distintos puntos del mineral deban mantenerse y declararse como Patrimonio Histórico.

A mí me parece que hay una sobredosis de egoísmo que se manifiesta en todas partes. Cada una vigila por sí mismo. Hay un veneno que carcome las relaciones humanas. Si se trata de una familia, el padre quiere que los demás satisfagan sus caprichos y demandas. Si se trata de un joven, busca pasarlo lo mejor posible sin preocuparse de cómo lo pasan los demás. Si se trata de un líder, la vanidad lo persigue y él se deja atrapar por ella.

Nos hemos acostumbrado a la contaminación humana. Se incentiva y premia el egoísmo. Que desata ambiciones desmedidas. Que ofrece una felicidad falsa y engañosa. Que publicita la deslealtad y el encierro. Que exalta la violencia. Que conjuga los verbos en singular y no en plural. Decirlo y reconocerlo a tiempo es fundamental. No queremos ir caminando aceleradamente hacia un abismo de soledades y frustraciones.

Sus palabras más sentidas de Jesús, el corazón de sus preocupaciones, es que sus discípulos se amen. Eso le interesa. Eso pide. Eso manda a sus seguidores. ¡Realmente fantástico!

Pero hay que tener cuidado: "Ámense", dice "así como yo los he amado".

No es con cualquier tipo de amor que estamos llamados a amarnos. Del amor se habla tan mal y tanto. Con la palabra amor se llega a justificar el desamor. El amor que él desea es especial: es el amor comprometido, ese que va más allá de sentir un gustito en la atracción o de sentir afecto por el otro. El amor de Jesús es de donación, de entrega, incluso de sacrificio y de sangre. Es el amor que da vida y da la vida. Es el amor desnudo de la cruz, signo de que él se da enteramente y sin reserva. Y precisamente este es el amor que se echa de menos entre nosotros.

Echamos de menos un amor que se ponga en el pellejo del otro, que tome la iniciativa para ayudar y compartir, que tenga en cuenta su realidad, que acompañe con paciencia, que sepa oír antes de hablar, que busque corregir y no sólo castigar, que no dure unos minutos, sino que permanezca por siempre. Y que, vivido a fondo, darle un rostro nuevo a la sociedad en que estamos.

Aquí está entonces nuestro desafío. Amar, es cierto. Pero con un amor con apellido: con el amor de Jesús, vivir un amor comprometido, cotidiano, cálido, generoso, alegre. De manera que el egoísmo desaparezca de nuestros corazones.

Arturo Mardones Segura,

Rotary Club Chuquicamata

Hay una serie de mitos y falsas creencias que están desvirtuando en nuestra zona la loable acción de donar órganos para personas que lo necesitan para seguir viendo.

Podrán darse muchos argumentos religiosos y místicos, pero la frase que dice "Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos", podría clarificar muchos temores y prejuicios.

Así como cualquier padre estaría dispuesto a donar un órgano para uno de sus hijos, también es posible donar uno de nuestras partes de nuestro cuerpo cuando sabemos que estamos muriendo y podemos dar vida a otros.

Es cierto que no es una decisión fácil, pero no podemos cerrarnos a esta posibilidad, cuando a través de este acto de amor podemos estar prolongando la vida de una persona, más aún si es niño o joven.

Resulta decepcionante que en cuatro año, en nuestra región solo se hayan dado cinco procuramientos en el Hospital Regional, que es el único centro que tiene la complejidad para realizar un trasplante de órgano.

La principal causa es la negativa de la familia de respetar la decisión que en vida tomaron sus seres queridos. Y las cifras lo demuestran. De 15 posibles donantes fallecidos, solo los familiares de dos permitieron que los órganos fueran trasplantado a otras personas.

De esta manera muchas personas que podrían prolongar sus vidas, mueren sin recibir la donación a tiempo. Así, las listas de esperas crecen y las probabilidades son mínimas. En nuestra región 20 personas esperan una donación. Dieciocho necesitan trasplante de riñón y dos de hígado.

Se requerirá seguir concientizando a la población de la importancia de donar y la urgencia que se requiere para que muchos pacientes puedan tener una sobrevida.

Tenemos que echar afuera los resquemores y desconfianza, y ver este acto como una gran muestra de amor para que otros vivan, cuando ya nuestro tiempo se ha cumplido.

No seamos egoístas porque en cualquier momento podremos ser nosotros los que necesitemos uno.