Pablo Orellana G.
La modernización del paseo Ramírez comenzó a inquietar a los suplementeros y comerciantes del sector comprendido entre calles Latorre y Abaroa debido a una serie de robos e inconvenientes en el funcionamiento de kioscos y puestos de venta de diarios y revistas.
Dentro de los principales motivos que acusan está el "hecho de que hemos debido asumir costos y también una constante sensación de inseguridad producto de que las maderas que cubren los trabajos, protegen también a delincuentes que de noche aprovechan este factor para desvalijar nuestros locales", comentó Javier Araya, propietario del conocido kiosco Disneylandia.
El pasado lunes por la madruga desconocidos desvalijaron completamente el 'Café al Paso', conocido punto que funciona al interior del Estadio Techado, sumando otro grave hecho delictivo en el sector que se encuentra bajo intensos trabajos de remodelación.
Funcionamiento
Los problemas que han generado los trabajos del paseo Ramírez han alterado además el "normal funcionamiento de nuestros kioscos, los que por ejemplo deben atender en espacios reducidos y siempre con el temor de robos y de que el municipio nos informe que debemos trasladarnos hasta otro punto y donde no tengamos público que se acerque", agregó un comerciantedel sector.
En el caso de Javier Araya, éste debió cambiarse de lugar, "y asumir un costo de arriendo y por ende las incomodidades de asumir nuevos costos de energía y sin saber por ejemplo si nos permitirán instalarnos nuevamente donde estábamos y si contaremos con los espacios que antes ocupábamos", agregó quien por 32 años se desempeña en el lugar.
Acusan además que algunos traslados de los kioscos no pueden funcionar debido a que no cuentan con los empalmes eléctricos necesarios para su funcionamiento, y que debido al alto costo que la empresa distribuidora cobra imposibilita que se hagan de manera rápida y efectiva.
Otro aspecto que recalcaron los afectados por esta situación guarda relación con el futuro de los permisos que el municipio cobra por el derecho a la instalación, "nosotros cancelamos dos permisos uno de piso y por concepto de patente, los cuales no sabemos si seguirán operando de la misma forma, puesto que de manera informal y en conversaciones con representantes de la empresa a cargo de las obras nos han dicho que dejarán espacios sólo para el funcionamiento de dos kioscos por cuadra y no de cuatro como había antes de los arreglos", añadió Araya.
Otro factor que ayer causó bastantes molestias entre los peatones que transitaban por el sector, fue el hecho de que los trabajos generaron atochamientos de vehículos y personas que trataban de cruzar calle Latorre, debido a que los semáforos del lugar debieron ser desconectados como parte de las obras que se ejecutan en esa intersección, y que pudo haber terminado en un accidente debido a las imprudencias tanto de conductores sin criterio, y de peatones que impulsivamente intentaban cruzar.
Ante este panorama los afectados manifestaron su incertidumbre.