Ricardo Pinto Neira
Fue Gerardo Mella quien encendió las alarmas tras votar en contra de la desafiliación de Deportes Concepción y ver cómo la ANFP decidió ponerle la lápida a una institución inviable, pese a que sólo recalcó lo que se dijo desde el primer día que asumió como presidente de Cobreloa: la herencia económica es desastrosa, los compromisos pendientes son varios y apremian.
Y principalmente, porque el mandamás loíno dejó claro que por estos días el flujo de liquidez que tiene la institución, revive el fantasma de una eventual quiebra.
Algo que en Calama aterrizaron de golpe, como lo expuso el presidente de la comisión fútbol, Walter Aguilera en diálogo con Radio María Reina.
"De seguro, Gerardo dijo eso por el contexto que había, con gente llorando por el tema de Concepción, porque de alguna forma hay un denominador común que son los problemas económicos de un club. Pero acá se está trabajando y evaluando. Por eso, hay que cambiar las formas de cómo estamos gastando los operacionales del primer equipo, definir cómo vamos a estructurar los contratos de los que lleguen, evitar regalías anteriores como casas, sueldos muy altos, beneficios. Hay que intervenir eso", explica.
Aguilera asegura que se está trabajando en repactar todas las deudas y cancelar los compromisos pendientes. "El seis de mayo se pondrá al día a los funcionarios, vamos a pagar la cuota histórica de los 105 millones de pesos. La deuda con la tesorería de los 600 millones de pesos es negociable si llegamos con poco menos del 30%, porque demostraremos que reconocemos la deuda y queremos pagar".
Y agrega que "hay compromisos que cumplir y estamos buscando la manera de hacerlo en un período de tiempo definido. Por eso, la primera parte fue evaluar y comenzar a buscar todos los recursos que estuvieran dando vuelta o se pudiesen gestionar. Cobreloa se está ordenando y hoy no es un club inviable".
El directivo asegura que los sueldos de los jugadores están al día, que las gestiones con una empresa de factory para conseguir recursos frescos no está descartada y por ahora no se finiquitó porque "falta que la ANFP sea garante. Ellos quieren respaldarse. Pero además de eso, tenemos dineros pactados para mayo e ingresos va a haber".
Aguilera le baja la cortina a la opción de propiciar una quiebra voluntaria desde la misma sociedad anónima. "Hay un consenso para que eso no pase, porque se ha conversado. Sólo se conversó el tema de vender acciones. A la cara, nadie me ha dicho dentro del directorio que quiera impulsar una quiebra. Para nosotros sería lo más fácil, irnos, dejar todo como está y pedir un síndico, pero sentimos que la situación es manejable".
La fórmula de la mesa regente en el club pasa porque "el club se ordene primero en lo administrativo y luego veremos lo deportivo".
Pero, ¿por dónde pasa la seguridad de Aguilera respecto a una supuesta llegada de acreedores que compliquen la caja naranja? "Nosotros tenemos deudas reconocidas y donde cualquiera de los acreedores puede reclamar por no pago. Y ante esas deudas, la prioridad la tienen los funcionarios y los demás tendrán que hacer fila. Por lo mismo, aquél que deba recibir un pago de Cobreloa de seguro elegirá esperar porque puede que no le convenga recibir sólo una parte de lo que le quiere pagar el club si es que genera demandas. Le conviene que nosotros reconozcamos la deuda y convengamos la forma de pago".
600 millones de pesos debe Cobreloa a la Tesorería General de la República. Pactará con el 30%.
2 meses sin sueldo tienen los funcionarios del club. Se les deben imposiciones previsionales desde octubre.