Pasaron varios años desde que el loíno Jonathan Retamal (29) disputaba las corridas del Ejército o las del Día del Trabajo en su natal Calama sin más ánimo que hacer deporte.
Hoy, el mismo entusiasta de esos primeros desafíos es un atleta medianamente consolidado, uno que recién en 2010 empezó a tomar en serio las pruebas de medio fondo y que en al ingresar a la Universidad Católica del Norte terminó por descubrirse en cuanto al talento y las posibilidades de ir a otras zonas a pelear medallas y medirse con los mejores.
"Cuando entré a Geología en la UCN tenía un compañero que corría en el equipo atlético de la universidad y me invitó a correr. Allí, participando en competencias conocí al profesor Jorge Grosser, ex atleta y entrenador que incluso fue a juegos olímpicos -descubridor de los campeones chilenos Víctor Aravena e Isidora Jiménez- y empecé a tomarme esto más en serio", comenta el atleta loíno que incluso trabaja en talleres de adultos y niños enseñándoles desde la respiración hasta cómo entrenarse para tener un buen estado físico y dedicarse al running.
Pero el mejor momento de Bolados llegó este año, cuando participó en los campeonatos presudamericanos Orlando Guaita y Carlos Strutz, obteniendo dos medallas de plata, pero principalmente, el crono necesario para representar a Chile en el próximo torneo iberoamericano de atletismo en Río de Janeiro, Brasil.
"Conseguí un tiempo de 1.49.17 en los 800 metros, que es mi prueba preferida y con eso pude clasificar a los juegos. La idea es ir a participar, disfrutar de esta posibilidad y ojalá bajar en un segundo mi marca. Cuando uno lleva años en esto y se fue preparando a conciencia, sabe que llega el momento de aprovechar, que es quizás la única oportunidad. Por eso, voy con todas las ganas de pasar el primer día, meterme en las semifinales y ojalá poder llegar al día final, porque el nivel allá sin duda que es demasiado alto", expone el corredor que dentro de estos días trabaja en la parte física de su preparación para luego viajar a Concepción a unos días de concentración final, eso antes de embarcarse a Brasil donde compite los días 14, 15 y 16 de mayo.
Dedicación
Bolados asume que "el problema de los deportistas de zonas alejadas lo sufrimos todos. Por ejemplo, yo tengo clara mi realidad y por eso he tratado de ser realista. Es una limitante cuando uno quiere optar a participar de torneos y pese a que representas a una comuna o a una institución, todavía hay poca disposición del sector privado para involucrarse con el deporte y apoyar lo que finalmente es una inversión".
Hoy combina estudios, trabajo y deporte y dice que "no me he dado mucho tiempo de buscar auspicios pero por estos días siento la necesidad de obtener más recursos. Raúl Bañados me apoya siempre hasta donde puede y ahora, Transporte esperanza, Daslav Nutrición y mi universidad con permisos y facilidades me están ayudando y uno lo valora mucho", dice el loíno que espera aportes en jbs010@ ucn.cl.
Su proyecto con Calama y opción de CAR
Jonathan Bolados sabe bien que "los mejores atletas del mundo se preparan y hasta viven en ciudades con altura, pasado los dos mil metros de altura sobre el nivel del mar y su rendimiento es definitivamente superior en momentos cúlmines. Por eso, es muy bueno que estén apareciendo atletas jóvenes en mi ciudad y que se proyecten a nivel de alta competencia. Yo sueño con ver a un loíno en unos 20 años más en unos juegos olímpicos e incluso tengo un proyecto desde mi lado profesional para concretar la idea de tener un CAR en la zona".
años tiene el competidor loíno que va por primera vez a una competencia de este nivel. medallas de plata ganó Bolados en los torneos Orlando Guaita y Carlos Strutz durante este año.
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