Pablo Orellana G.
En la misma intersección, casi al mismo horario y en el mismo contexto dos desconocidos que se desplazaban en motocicletas, abordaron a una trabajadora para obligarla a entregarles sus pertenencias y objetos de valor. Los asaltantes en todo momento cubrieron sus rostros con los cascos que portaban al interceptar a la mujer de 45 años entre calles Vivar y Vargas.
El pasado viernes 20 del presente mes un trabajador que esperaba el vehículo que lo transportaría hasta la división Gabriela Mistral sufrió el asalto en las mismas condiciones que la mujer de 45 años y en las que se repite el mismo modus operandi: dos desconocidos de acento extranjero que aprovechando la oscuridad y la velocidad de sus motocicletas abordan a un transeúnte intimidándolo con armas de fuego para obligarlo a entregar sus pertenencias.
Indagaciones
Debido a que se trata de hechos graves Carabineros inició una investigación que permita dar con el paradero de los desconocidos que atacan de madrugada a transeúntes solitarios que han sido afectados en esa céntrica intersección y que en una semana ya cuenta con dos personas que han sido víctimas de estos sujetos a través del método conocido como 'motochorro'.
Pese a que en el caso de la trabajadora, quien sólo sufrió el robo de su bolso, ésta fue atacada en las mismas circunstancias que el de la pasada madrugada del viernes 20 de mayo. Por tal motivo, las pesquisas policiales apuntan a que este conocido método delictivo que irrumpió en el país hace pocos años, "es estudiado y hecho no al azar, sino más bien a un perfil de los delincuentes que buscan personas que estén solas, y en lugares de poco movimiento y tráfico'.
Tras recibir y procesar las denuncias, en Carabineros explicaron que las indagatorias ya comenzaron y por motivos del hermetismo necesario para esta, 'los pormenores no pueden ser adelantados'.
Recomendaciones
Al igual que en la primera de estas, Carabineros reiteró que el autocuidado es fundamental si es que transeúntes y trabajadores que deban abordar vehículos en la intersección de calle Vivar con Vargas para llegar a sus destinos laborales. Además, no portar objetos de valor, y en ningún caso intentar repeler el ataque "porque nunca se sabe la reacción de los delincuentes, quienes no vacilarán en defenderse a través de la violencia", subrayaron desde la institución.
Las similitudes, métodos y las circunstancias elegidas por estos motoristas fueron idénticas en ambos casos, destacando la rapidez con que actuaron, utilizando armas de fuegos para la intimidación de sus víctimas y a rostro cubierto para impedir que los afectados aportaran sus rasgos y descripciones a la policía.
La precaución de trabajadores y personas que deban transitar por el sector, que no cuenta con monitoreo de cámaras de vigilancia, es una de las claves vertidas por Carabineros que aumentará rondas y patrullajes por el sector.