Argentina se unió hoy a Brasil y al conjunto de otras seis naciones europeas que se clasificaron para la segunda rueda final del Décimo Campeonato Mundial de Fútbol, en justo premio a su accionar y al amor propio de cada uno de sus hombres. Argentinos y brasileños integrarán el mismo grupo en la siguiente fase.
Hace unas semanas una agrupación de pacientes se dio cuenta que en 40 de las 80 patologías cubiertas por el Plan Auge había un error en el cálculo, que incrementaba el copago de futuros pacientes. Esta situación dejó en evidencia no sólo una grave desprolijidad por parte del Ministerio de Salud, sino una falla en toda la cadena de la administración pública.
La dictación de un decreto -como el que modifica el Auge- sigue un proceso que involucra al Ministerio de Salud, Fonasa, la Dirección de Presupuesto (Dipres), Ministerio de Hacienda, hasta la firma presidencial y la toma de razón por parte de Contraloría.
Pero aquí hubo un error en todo el proceso. Y al quedar en evidencia, la responsabilidad administrativa quedó sólo circunscrita al jefe de la División de Prevención y Control de Enfermedades (Diprece) del Ministerio de Salud y la encargada de la Secretaría Ejecutiva del Auge, quienes fueron removidos de sus cargos. ¿Y qué pasa con la responsabilidad de Fonasa y la Dirección de Presupuestos?, entidades encargadas de velar por el correcto uso de los recursos públicos y los que hacen los cálculos financieros del impacto de todos los programas de salud. ¿Nadie se dio cuenta?
¿Cómo un error de estas características -con serias consecuencias para los pacientes- , pasa inadvertido por tantos profesionales técnicos? y ¿cómo es posible que la responsabilidad exigible -al menos públicamente-, sea sólo administrativa?
Para ahondar en el problema, las autoridades de Salud cuando deben dar cuenta de esta situación ante la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, con absoluta carencia de vergüenza, responsabiliza de este hecho a la administración anterior, como si el espíritu de las ex autoridades de la cartera rondara por los pisos de Mac Iver 541. Una manera poco ética de tapar equivocaciones.
Se consideró por parte de los parlamentarios, que para dirimir las responsabilidades en este caso, se necesitaba crear una Comisión Investigadora, pero en definitiva con ello sólo se ha conseguido dilatar la responsabilidad de esta negligencia. Los errores hay que enmendarlos y corregirlos rápido y sin excusas que morigeren la inoperancia e ineptitud.
Luis Castillo,
Decano de Medicina Universidad San Sebastián
El gerente de la División Chuquicamata, Carlos Rubilar Ottone, informó que de concretarse la amenaza boliviana de evitar que el cauce del río Silala llegue hasta nuestro país, ello no afectará la producción de cobre de la empresa estatal. "Tenemos otras fuentes alternativas en caso de que se presente algún problema".
Triturado por una máquina de ferrocarril murió un obrero de Chuquicamata mientras realizaba labores de cambio de vía en el interior del mineral. El accidente se produjo a las 11.30 horas de ayer, cuando la víctima identificada como Leonardo Cruz Plaza, de 48 años, cumplía con sus faenas y fue arrollado por una pesada máquina.
Uno de los proyectos largamente anunciados y esperados por los calameños es el nuevo edificio municipal. Principalmente porque el actual inmueble ya se hizo pequeño para la gran cantidad de estamentos que hoy conforman el municipio y que son primordiales para el desarrollo comunal.
Su colapso ha obligado a sacar algunas de sus reparticiones a otros inmuebles, provocando un gasto adicional por concepto de arriendo. Además de entregar un servicio de atención muy lejano al óptimo.
Verdades que se suman a la urgente necesidad de entregar señales de modernidad a la ciudad. Un nuevo edificio consistorial con detalles de vanguardia y concentrando a todas sus reparticiones en un lugar espacioso y amable, no haría otra cosa que hablar bien de las autoridades calameñas y el respeto hacia sus ciudadanos.
Eso es lo que se tiene que sopesar al momento de la discusión de que si es prioritario o no. Pensar que será más cómodo para la gente ya es suficiente.
Por ello alegra la determinación de los ejecutores municipales quienes informaron de los avances que tiene el proyecto que se financiará con los recursos del plan Nuevos Tiempos para Calama, el que cuentan con respaldo presidencial.
Se prevé que en 2017 ya se finalizarán los trámites administrativos para iniciar la ejecución de la obras, las que tiene un costo superior a los 18 mil millones de pesos. La construcción se levantarán en terrenos de la exfinca San Juan.
Se conoce que es un proyecto ambicioso pero con un objetivo social que repercutirá en una mejor atención a todos los calameños y calameñas sin distingo, en un espacio que puede convertirse incluso en una zona de recreo.
Ha tardado tiempo para ver que se avanza en un tema que hace más de una década ya se conocía. Ahora resta esperar que los proyectistas logren satisfacer los requerimientos regionales para que empiece rápidamente a construir la nueva casa consistorial, que marcará la llegada de la modernidad a los estamentos públicos de la comuna.