El ejemplo de una generación dorada
Los jóvenes que conforman la selección chilena con humildad y mucho sacrificio han sumado triunfos nunca antes vistos. Estas enseñanzas, que no sólo atraviesan al deporte, sino a la vida son las que quedan para las generaciones futuras de nuestro país.
Los jóvenes futbolistas que el pasado domingo ganaron la Copa América Centenario, han sido clasificados dentro de la llamada "generación dorada". Una definición que se ha forjado en los resultados que este grupo de deportistas ha logrado defendiendo los colores de la selección chilena.
Son jóvenes con historias disímiles, pero en las que predomina el esfuerzo y el trabajo orientado a conseguir logros deportivos.
Algunos, proveniente de sectores sociales conflictivos, han logrado zafarse de esa condición y han podido llegar al deporte de la alta competencia. Y no sólo, ser reconocidos en lo deportivo, también se han transformado en un referente de comportamiento y de sacrificio.
El caso de Gary Medel es notorio. Sin contar con mucha de la educación tradicional, se ha formado en el camino y es muy respetado por su entrega y por su sacrificio al jugar por la selección chilena.
Un futbolista que proviene de los barrios conflictivos de Santiago y que si no es por el deporte, como el mismo lo ha dicho, habría caído en los delitos.
Medel salió de esa condición y hoy es uno de los más queridos del equipo chileno.
Este ejemplo, con algunos matices, se repite en otros de sus compañeros. Deportistas dotados de mucho talento, y que se han enfocado en luchar y salir airosos.
Y esta lucha también la han tenido fuera del terreno de juego, debido a las grandes cantidades de dinero que reciben y las tentaciones a las que se ven sometidos, las que han podido dejar de lado por su convicción.
Hoy con dos títulos en Copa América, podrían sentir que ya cumplieron. Pero son jóvenes y sienten que aún pueden ir por más, tal vez por un campeonato mundial.
Sin duda, es un buen ejemplo el que entregan este grupo de futbolistas. Han demostrado que con esfuerzo, dedicación, perseverancia y sacrificio se le puede torcer la mano al destino y ser exitosos.
Enseñanza que no sólo atraviesa al deporte sino a la vida, y ello es lo que queda para las generaciones futuras.