Congreso despacha proyecto que permite a Metro emitir tarjetas de prepago
OBJETIVO. La iniciativa busca aumentar la inclusión de sectores que no pueden acceder a productos bancarios.
La Cámara de Diputados aprobó ayer en tercer trámite el proyecto de ley que permite la emisión de medios de pago con provisión de fondo por entidades no bancarias, entregándole a Metro y otros emisores no bancarios la posibilidad de emitir tarjetas de prepago.
El proyecto busca elevar los márgenes de inclusión financiera y permitir que entidades como retail, cooperativas y cajas de compensación, entre otras, emitan plásticos de prepago, para otorgar acceso a sectores que, por su menor poder adquisitivo, no cuentan con instrumentos que entrega la banca.
Futura promulgación
El proyecto quedó en condiciones de ser promulgado por la Presidenta Michelle Bachelet, hecho que fue valorado positivamente por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.
"Este es un proyecto que va a permitir que emisores no bancarios puedan emitir tarjetas que compitan con los bancos en prepago", explicó.
Bancarización
Según el secretario de Estado, las personas de mayores recursos en Chile "hace tiempo se bancarizaron", reemplazando el uso de efectivo por las tarjetas o medios electrónicos para pagar. "Este es un esfuerzo para darle más competencia a esto y pueda llegar a muchos más ciudadanos, para que tengan los mismos accesos que tienen el mundo desarrollado y la gente con más recursos", añadió el jefe de Hacienda.
El papel de metro
Respecto del rol que tendría Metro para permitir que la tarjeta BIP entre a este sistema, el jefe de las finanzas públicas añadió que este es un proyecto en el que la empresa estatal quería participar y ahora es su tarea definir su eventual participación.
"Es una decisión que tiene que tomar el directorio de Metro, tienen que formar una filial y tienen que darle acceso también a otras tarjetas para que se pague en Metro. Esto va para los dos lados", manifestó.
Valdés adelantó que si Metro así lo decidiera, los usuarios de la tarjeta BIP podrían ocuparla en otros comercios, "para pagar un peaje, para comprar en un quiosco. Esto también va a permitir que otras empresas puedan emitir esto y que el Estado eventualmente pague más de los beneficios sociales con plásticos".
El ingreso de Metro a esta iniciativa encontró la resistencia de varios sectores, entre ellos instituciones de la banca y el retail.