El peligro de las redes sociales
Muchos usuarios creen que todo lo que se publica en estos sitios, perfiles o cuentas es una verdad absoluta, siendo que existen muchas inexactitudes. Las autoridades policiales han planteado que una de las razones de la inseguridad que se vive en nuestra comuna se debe a noticias falsas publicadas medios no tradicionales.
No son pocos quienes asumen que lo que se publica en redes sociales es una verdad absoluta. Muchos ni siquiera lo cuestionan, como sí lo hacen con los medios tradicionales a quienes siempre atribuyen tendencia o favoritismo con ciertos sectores de la sociedad.
Pero con las redes sociales llámese Facebook, Watassp, Instagram y otros, suele creerse que lo publicado es cierto y que alguien bien intencionado lo subió a la web para mantener informada a la población.
Lo malo es que en muchas ocasiones hay informaciones erróneas y otras definitivamente falsas y al no ser cuestionadas crean un efecto muy dañino en la sociedad. La gente le da fe a lo publicado y comienza una espiral de confusiones e inseguridades.
Las autoridades policiales ya conocen este fenómeno y a través de las páginas de este medio han planteado que el clima de inseguridad que se vive en nuestra comuna se debe en gran medida a noticias falsas publicadas en alguna de las redes sociales. En las que el desmentido tarda en llegar o definitivamente no se hace perpetuando en la imborrable red hechos que no acontecieron.
En este aspecto las plataformas digitales de los medios tradicionales suelen ser el mejor referente para informarse, porque su condición y la de los profesionales que la integran obligan a que una información sea la suficientemente chequeada y contrastada antes de su publicación.
Con ello se evita caer en errores e inexactitudes que van en contra de la misión de informar.
Las redes sociales son una tremenda herramienta de comunicación rápida entre las personas y sus distintas aplicaciones han llegado para convertirse en parte de la vida diaria de la comunidad. De hecho, el tiempo que se destina a su utilización consume varias horas del día.
Pero, por el momento, no han llegado para sustituir a los medios de comunicación formales, quienes sí han sabido adaptarse a su irrupción para ingresarlos como parte de sus plataformas existentes parra entrega de información, como lo aconseja la modernidad galopante.