Luis Grandón A.
Bajo el caótico ritmo en el que se desenvuelve la sociedad actual, padecer algún tipo de afección significa quedar un paso más atrás que el resto de la masa. Pero esto resulta mucho más gravitante cuando esa indisposición se relaciona a una enfermedad que podría conllevar un mal pronóstico.
Para muchos la palabra cáncer es sinónimo de muerte. Claro, si es detectada de forma tardía, podría llegar a al este fatídico desenlace. Pero cuando la enfermedad es hallada a tiempo las probabilidades de torcer la mano al destino se elevan.
El cáncer es un grupo de enfermedades, que se caracterizan por la multiplicación descontrolada de células que adquieren la capacidad de invadir otros tejidos vecinos y a distancia.
Esto último es denominado metástasis, que es la principal causa de muerte, debido a que destruye el tejido sano e interfiere con el normal funcionamiento de los órganos.
Existen más de 200 tipos de cáncer, cada uno de los cuales tienen diferentes síntomas y tratamientos.
En este sentido, se debe mencionar que en Calama diversos factores externos inciden en la aparición de esta enfermedad.
En Chile, el tipo de cáncer más detectado es el de pulmón. Pero en Calama esto varía drásticamente. No por el aumento en la cantidad de casos, sino porque el diagnóstico más elevado se encuentra en el cáncer a la piel.
"Aquí existen factores locales que inciden en que haya más riesgo de generar esta patología. En Calama semanalmente se detectan dos casos de cáncer a la piel", así de drástico es el jefe de la unidad de Anatomía Patológica del hospital Carlos Cisternas, Rodrigo Meza.
El especialista manifiesta que la ubicación geográfica en la que se encuentra Calama es uno de estos factores.
"Nos encontramos sobre el trópico de Capricornio y cercanos a la Línea del Ecuador. Esto significa que el ángulo de incidencia de exposición a la radiación ultravioleta es mucho más directo, si es que nos comparamos con el sur del país".
El doctor explicó que el ángulo al que hace referencia tiene directa relación con el daño que sufre la piel al exponerse continuamente al sol.
"En Calama el ángulo de incidencia es cercano a los noventa grados. Esto significa que con tal nivel de exposición a los rayos UV, estos logran penetrar hasta las capas profundas de la epidermis", declaró.
Ante esta situación, la dermatóloga del hospital, Lidia Gómez, argumentó que "en nuestra especialidad uno de los conocimientos básicos es que, en el mundo, uno de los sitios de mayor peligro por la radiación UV es, precisamente, el desierto de Atacama".
Otro de los factores que favorecen la generación de esta patología es la altura geográfica.
Al encontrarnos a 2.600 metros de altura, por sobre el nivel del mar, "la atmósfera que nos protege es más delgada, revistiendo mayor riesgo", comentó Meza.
De acuerdo con el doctor, la migración también es uno de los actuales factores de riesgo. Esto debido a que "la piel de aquellas personas que llegan hasta nuestra ciudad no está acostumbrada a recibir tan abundante radiación solar".
Dentro de esta patología, el mayor número de diagnósticos se refieren al carcinoma basocelular. " Cuando es detectado a tiempo no reviste mayor peligro y el tratamiento, básicamente, es quirúrgico", explica Meza.
Pero, lo que enciende las alarmas en el equipo médico es el aumento en la detección del melanoma, el tipo de cáncer a la piel más agresivo que existe.
"Estamos en el orden de un caso por cada dos meses y consideramos que en el corto plazo esto aumente. Esto no es porque ahora tengamos más cáncer de este tipo, sino que con la llegada de la especialista en dermatología, se van a comenzar a detectar una mayor cantidad de casos", declaró el especialista de la unidad de Anatomía Patológica.
Al respecto, el director del hospital Carlos Cisterna, Patricio Toro, menciona que "en Calama una de cada diez personas atendida por problemas dermatológicos tiene cáncer a la piel. A nivel nacional estamos punteando por lejos en este tipo de patología".
El director agregó que "con un diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado, llevado adelante por la especialista, es una gran ventaja con la que cuenta ahora nuestra ciudad".
Detección
Las claves para evitar que se presente esta enfermedad es la prevención y la detección temprana.
En este sentido la doctora en dermatología, Lidia Gómez, enfatiza que en esta zona geográfica es crucial la utilización del protector solar para prevenir la aparición del cáncer a la piel.
"Los protectores solares que deben utilizarse son aquellos que como mínimo poseen el factor 30 y el máximo que de 50".
Frente a esta situación, la especialista aclaró que en la actualidad en el mercado se ofrecen este tipo de productos que llegan, incluso, al factor 100, lo que según sus declaraciones "eso es químicamente imposible".
De acuerdo con la doctora Gómez, en Calama se debe utilizar el protector solar durante todo el año. La forma correcta de hacerlo radica en la cantidad y frecuencia con que se aplique el producto.
"Generalmente el protector, por efecto de la evaporación, dura en nuestra piel un periodo no superior a las 4 horas. Por eso debe ser aplicado, por lo menos, cada tres horas, aumentando su frecuencia en verano", enfatizó.
Para muchas personas puede resultar incómodo aplicarse el protector, por la composición espesa que presentan algunos de estos o por la consistencia aceitosa de otros.
Pues bien, el mercado ofrece una amplia gama de productos para cada tipo de persona, por lo que actualmente no existe excusa para no utilizar esta protección, manifestó Gómez.
Lunares
Otro de los alcances que realizó la especialista apunta al control de los lunares que aparecen en la piel y el control que se debe tener sobre ellos.
"El auto examen es importante. Conocer nuestro cuerpo y saber claramente dónde se ubican y cómo se van desarrollando ciertos lunares resulta clave a la hora de un diagnóstico oportuno", dijo.
Las manifestaciones cutáneas se dividen en tres tipos:
Carcinoma Basocelular: Es el más simple y no reviste mayor riesgo si es diagnosticado a tiempo.
Carcinoma espinocelular: Tienden a confundirse con verrugas por su textura y su bulto característico, pueden expandirse en la piel y llegar a atacar a los ganglios, requiriendo estudios avanzados y una cirugía mayor.
Melanoma: Es peor de todos, por su capacidad de metastizar a cualquier parte del cuerpo. Para su tratamiento se requiere cirugía mayor, estudios avanzados y quimioterapia. En el mayor de los casos resulta mortal.
De acuerdo con datos proporcionados por la secretaría regional de salud de Antofagasta, en la región los hombres presentan una mayor incidencia de cáncer a la piel no melanoma, respecto de las mujeres al considerar el período 2003-2010: 57,3 versus 43,6 por cien mil, respectivamente.
Estamos adportas de la temporada estival. El calor aumenta y, con ello, también los riesgos de exposición a los rayos UV.
La recomendación es clara, no exponerse al sol entre las 11 y las 16 horas, y usar siempre protector solar. Las personas de piel blanca factor 50 y personas de piel morena factor 30 o más.
Se debe repetir la aplicación del filtro solar cada 2 ó 3 horas.
2 casos de cáncer por semana es el registro que se tiene en la unidad de Anatomía Patológica del hospital Carlos Cisternas de Calama. Se espera que esta cifra aumente, con la llegada de la especialista en dermatología se diagnosticarán una mayor cantidad de casos.
50 es el factor de los protectores solares indicado para las personas de piel blanca, que deben tener especial cuidado con las quemaduras en la cara, los hombros, las orejas y la zona de los pies.
57,3% de los casos detectados corresponde a hombres. Estos presentan una mayor incidencia de cáncer a la piel no melanoma, respecto de las mujeres que alcanzan el 46,3 %.