"Hay más conciencia de que la repitencia no es banal"
ANÁLISIS. La investigadora UC Consuelo Béjares estudió los efectos a largo plazo de no promover a un alumno. Dice que si bien en Chile no es posible eliminar este mecanismo, se puede avanzar en programas que ayuden a identificar a quienes están en riesgo.
Repetir de curso es mucho más que "perder el año" o salir más tarde del colegio. Según académicos de la Universidad Católica, no promover de nivel a un escolar puede tener efectos más allá de lo académico: consecuencias en la autoestima y el futuro laboral.
Los investigadores Consuelo Béjares y Cristóbal Villalobos, del Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación (CEPPE) de la UC, hicieron una revisión bibliográfica del tema y encontraron que, al repetir de curso, se favorece la pérdida de autoestima, el aumento en las brechas de rendimiento académico y la deserción.
"La conclusión no es que no se debería dejar nunca repitiendo a un estudiante, sino que lo que se propone es que se deben revisar los criterios con que eso se hace y los programas o métodos de apoyo a los estudiantes que están en peligro de repetir", explica este medio Consuelo Béjares.
La importancia de revisar estos métodos de apoyo tiene que ver con "las consecuencias que tiene la repitencia del estudiante, tanto socioemocionales, en términos de su autoestima, como a nivel académico y, a futuro, en sus oportunidades laborales y de vida", agrega.
De esta forma, lo que proponen los autores es fortalecer los programas de apoyo "para identificar anticipadamente a los estudiantes que puedan estar en riesgo de repetir".
- ¿Cuáles son los casos en que la opción de la repitencia sí debería ser considerada por los profesores o los establecimientos educacionales?
- En el caso de la repitencia, además de los criterios establecidos, hay criterios que dependen de la autonomía del establecimiento, del profesor, del equipo directivo. Es importante que eso se mantenga y que ellos puedan evaluar si un estudiante no logró los conocimientos y habilidades requeridos para su edad y el curso en que ese estudiante está. En ese caso, obviamente, no puede ser promovido, la repitencia tiene que ser una opción. Lo que sí se propone es que, en muchos casos, los estudiantes repitan ciertos contenidos o habilidades que el estudiante no logró y no todos los que corresponden a un año escolar. Aunque es difícil su aplicación en este momento en Chile, en otros países se usa la opción de poder repetir, por ejemplo, una sola materia. Hay otros países que tienen cursos de recuperación en el verano, donde el estudiante puede volver a hacer un ramo o una asignatura e integrarse en el curso siguiente y no repetir todo el curso.
- ¿Hay países que no apliquen la repitencia?
- Sí, es lo que llamamos promoción automática, donde casi la totalidad de los alumnos son promovidos al siguiente curso.
Recomendación
- ¿Y eso se podría aplicar en Chile?
- Nosotros, en el estudio no recomendamos esta opción, porque la promoción automática se usa en pocos países y va asociada también a otras características del sistema educacional, en cuanto a logros académicos, a desarrollo y a programas de apoyo. La promoción automática no significa que el nivel de logro del estudiante sea promovido, sino que es promovido al siguiente curso, porque logró los conocimientos requeridos para ese nivel. En nuestro caso, al identificar niños que no lograron lo que se les pide en cierto curso, no es que sí o sí estemos diciendo que debe ser promovido. Necesariamente ese niño necesita otro apoyo. Entonces, la promoción automática no es algo que podamos recomendar en este momento en Chile.
- Desde el punto de vista más práctico, ¿cuál es la recomendación para los padres o apoderados que ya han pasado por una situación en la que su hijo/a ha repetido o ha estado en riesgo de repetir?
- La recomendación es que se apliquen programas de apoyo, de reforzamiento de los contenidos que el estudiante tiene débiles. En el caso de estudiantes que han repetido anteriormente, se necesita un apoyo más allá de lo académico, un apoyo sicosocial, que les permita a los niños darse cuenta que ellos pueden lograr lo que se les está pidiendo, que pueden pasar de curso, porque, como vimos en el estudio, se genera un problema de autoestima en el niño y también un problema de expectativas en los adultos, tanto profesores como apoderados que le puedan estar transmitiendo al niño cierto miedo, cierta preocupación porque no logró pasar de curso. Eso también le puede crear una ansiedad.
- ¿Crees que en el país hoy hay suficiente conciencia sobre los efectos que tiene la repitencia, desde el punto de vista de la comunidad docente y las autoridades educacionales?
- Creo que, en general, sí. Todos los docentes que tienen contacto directo en el aula están conscientes de lo que puede provocar que un niño repita. Sin embargo, en muchas escuelas no están los medios como para poder darle más apoyo a esos niños, programas de apoyo, horas extras, etc.; no está la capacidad en horas humanas para hacerlo y eso hace que finalmente el niño quede repitiendo y se deba tomar esa decisión. Pero, cada vez más, creo que sí existe una conciencia de que no es una decisión banal, de que la repitencia tiene efectos a largo plazo para los estudiantes.
Consuelo Béjares es investigadora del Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación (CEPPE) de la Pontificia Universidad Católica. Es socióloga de esa casa de estudios y Master in Social Policy de la Universidad de Melbourne, Australia. Junto a su colega Cristóbal Villalobos investigó los efectos de la repitencia.
Mabel González
mabel.gonzalez@mediosregionales.cl
Investigadores de la universidad católica determinaron que repetir de curso favorece la pérdida de autoestima.
Los especialistas sugieren fortalecer los programas de reforzamiento y el apoyo sicosocial.