Se define como inequidad a las diferencias en salud innecesarias, evitables e injustas (Whitehead 1990), concepto fuertemente integrado en las políticas públicas de Chile en las últimas décadas, cerrando brechas estructurales, tecnológicas y de recursos humanos, tristemente estancadas en los años 80, donde paralelamente emerge un sistema privado en una lógica sanitaria distinta, aumentando la inequidad, entregando a un sector de mayores recursos y con menor carga de enfermedad, un sistema más accesible pero absolutamente menos solidario con un sentido de economía neoliberal en que la salud es un bien de consumo y no un derecho. El desarrollo del país ha permitido ir cerrando brechas, hoy se garantiza financiamiento, calidad, acceso y oportunidad a 80 patologías que dan cuenta del 70% de la carga de enfermedad de la población, a través del Programa AUGE, gran avance en derecho y equidad en salud.
Si bien hemos avanzado, el camino por recorrer es aún mayor, los estándares son cada vez más exigentes, no hace más de 20 años, el hospital de Calama contaba solo con un médico de turno, para toda la ciudad, siendo pediatra , internista, anestesista, cirujano, traumatólogo, radiólogo y hasta médico legista, concentrado en este súper especialista, agotado y angustiado, con un refuerzo en maternidad, en un hospital colapsado, con camas hasta en los pasillos, escasa tecnología, unos pocos especialistas y un grupo de esforzados funcionarios en el único hospital público de esta rica ciudad enclava como isla del desierto.
Qué contraste, cuando proyectamos para el nuevo hospital de Calama, 13 especialistas simultáneamente en turno para los distintos requerimientos sanitarios de nuestra población, con la mejor tecnología médica actual sustentado en una estructura arquitectónica adecuada y digna.
El esfuerzo actual de las políticas públicas en salud, es renovar toda de infraestructura sanitaria, Hospitales, consultorios y postas rurales, claro ejemplo es nuestra región, así como incorporar y retener a más de 4000 especialistas, con incentivos y becas de especialización (actualmente sólo el 43% de los médicos especialistas están en el sistema público) reforzar claramente la atención primaria, en procesos, infraestructura, tecnología y mayor número de médicos en programa de destinación y formación, futuros nuevos especialistas del sistema.
Dr. Patricio Toro Erbetta,
Director del Hospital "Carlos Cisternas"