La definición de Urgencia está relacionada con la percepción por parte del paciente o de su familia que la condición de salud actual de un individuo, requiere de un tratamiento y resolución inmediata, sin embargo esta condición no necesariamente implica una emergencia médica, dado que se basa en una apreciación subjetiva de peligro, por otro lado Emergencia médicas se define como la condición deteriorada de salud, de un individuo, que debe ser atendida en forma urgente, para evitar complicaciones, secuelas y a veces la muerte.
Los servicios de Emergencia hospitalaria del sistema público de Chile, están orientados a la atención de emergencias médicas. Pero sin duda una de las dificultades que enfrentan, es el elevado número de consultas no pertinentes que diariamente concurren a estos servicios, congestionándolos y resultando en esperas de varias horas para la resolución de patologías banales o que no revisten riesgo evidente, que pudieran ser postergadas para atención ambulatoria o que pudiesen ser resueltas en otros dispositivos de salud de menor complejidad, generando molestia en la población, reclamos frecuentes, exposición innecesaria a gérmenes e ineficiencia de los sistemas sanitarios.
En el Hospital de Calama, hemos hecho esfuerzos continuos en educar a la población beneficiaria, con el fin de mejorar la pertinencia de las consultas en Unidad de Emergencia, el año 2016 de 72.600 consultas, el 45% de ellas no fueron pertinentes, para aclarar el puntos, se denomina consulta pertinente a todas las consultas, que por su condición, requieren ser atendidas en forma inmediata o urgente.
El proceso de atención de emergencia, se inicia con la admisión, donde se inscribe el paciente y se abre una ficha de consulta , luego viene la categorización, la que incluye evaluación de signos vitales y análisis de motivo de consulta, categorizando a los paciente en 5 niveles de priorización: C1 pacientes críticos o en riesgo vital, requiere atención inmediata; C2 pacientes graves , sin riesgo vital, deben ser atendidos antes de 30 minutos; C3 pacientes de mediana complejidad, sin riesgo vital, su atención dentro de las 2 horas; C4 usuario de baja complejidad, su consulta puede ser resuelta desde 2 horas en pediatría y en 4 horas o más en adultos; C5 son de consultas no urgentes o banales, pudiendo demorarse de 3 o más horas en pediatría desde 6 horas en adulto pudiendo preferentemente, estos dos últimos, dirigirse al SAPU o SAR o a consulta electiva de atención primaria.
Dr. Patricio Toro Erbetta,
Director del Hospital "Carlos Cisternas"