Médico explicó algunas señales de los niños del espectro autista
ATENCIÓN. Profesionales manifestaron que es fundamental un diagnóstico precoz para un efectivo tratamiento
Ayer se celebró el Día Mundial de la Concienciación del Autismo, condición que tiene una marcada presencia en Calama, por lo que el neurólogo infantil del hospital Carlos Cisternas, Gustavo Mallea, explicó a qué señales los padres deben estar atentos, cómo se realiza su diagnóstico y el tratamiento que se aplica.
En este contexto, dijo que hay sospechas iniciales, "cosas que nos pueden dar luces", como por ejemplo que el niño no fija su mirada o no sonríe antes de cumplir un año, que sea hipotónico o que no alcance los hitos de desarrollo que debe tener, "como que no juegue con sus papás, que no se conecte con el medio, que haga pataletas que no se pueden controlar o que no ceden a pesar de los esfuerzos".
"Son cosas que hacen sospechar y que cualquier persona de la población lo puede ver y consultar. Pero las cosas más específicas se hacen en los consultorios con los test de desarrollo psicomotor y, en ese caso, cuando salen bajos me los mandan con la sospecha de autismo u otros sólo por un retraso en el desarrollo", manifestó.
El especialista explicó que para el autismo no hay una imagen, una resonancia, una prueba de sangre o un examen genético que lo revele. "La causa específica no se conoce cien por ciento, hay teorías que hablan de lo genético, de contaminantes ambientales o del neurodesarrollo, entre otros. Por lo que el diagnóstico es clínico", detalló.
Mientras que en cuanto al tratamiento, dijo que hay con o sin fármacos, "depende de las características que tenga el niño, pudiendo sólo derivarlo a la psicóloga o la fonoaudióloga. Pero en otros casos, cuando no se pueden manejar, se ofrece un tratamiento farmacológico".
En tanto, Mallea aclaró que en cuanto a esta condición lo correcto es hablar de trastorno del espectro autista.
"Hay niños que son muy severos y es lo que la mayoría de la gente se imagina, como uno que no habla, que está mirando una pelota que gira permanentemente, que no se comunica, que no mira a los ojos… nada. Hay otros que están mejor que eso y algunos que tienen muy buen pronóstico y que están muy cercanos a una línea que separa a los niños neurotípicos", explicó.
También, dijo, que esta condición no está relacionada directamente con la inteligencia.
Por su parte, la fonoaudióloga, Javiera Zúñiga es la encargada de facilitar el mejor tratamiento, el que generalmente se vincula al cómo le doy el mejor uso al lenguaje, donde destacan las normas de cortesía, hasta cómo se desarrolla una conversación.