Willy Briceño Romero
Sin mayores contratiempos ayer, se realizó en forma coordinada el traslado de 34 pacientes de las unidades de pediatría, cirugía, medicina y médico quirúrgico desde el antiguo al nuevo Hospital Carlos Cisternas de Calama.
Para hoy se contempla el último traslado de los pacientes más críticos desde el antiguo al nuevo recinto asistencial de salud pública en la comuna, como son la UTI, ginecología y obstetricia, pabellón de urgencia y emergencia.
Cabe señalar que la unidad de urgencia concluirá la atención hoy, a las 8 horas, dando inicio el siguiente turno en las nuevas dependencias de emergencia ubicada en las modernas instalaciones del centro hospitalario de la ciudad.
Al igual que en la jornada de ayer, el traslado de pacientes se iniciará a las 10 horas, con el mismo recorrido de las ambulancias dispuestas para tal fin, con el cierre de las calles y avenidas consideradas en primera instancia.
Es decir, Félix Hoyos, Granaderos, Maipú. Chorrillos, Balmaceda y Grau, con el corte de estas arterias por algunos minutos, y posterior apertura a la locomoción particular y colectiva, causando el menor impacto vial posible de acuerdo a lo planificado por los entes respectivos.
El intendente regional, Marco Antonio Díaz, puntualizó que esto era un hito para la comunidad, el solo hecho de pasar de ocho mil a 34 mil metros cuadrados de construcción e instalaciones de alta tecnología resulta relevante.
La autoridad gubernamental resaltó que "da cuenta el compromiso que tenemos que tener con cada una de las comunas de la región, y en este caso Calama ocupa un lugar muy especial en este día".
Asimismo destacó el trabajo de los funcionarios del recinto asistencial público, ya que desde hace tiempo atrás que están planificando este traslado sistemático de los pacientes de menor complejidad, y los más críticos en la presente jornada.
"Sabemos que en este nuevo hospital tanto por especialidades como de recursos humanos y materiales vamos a tener mejores condiciones", puntualizó, aunque agregó que "estamos con todos nuestros esfuerzos enfocados en hacer un trabajo bien".
Positivo balance
Mientras que el director subrogante del Servicio de Salud de Antofagasta (SAA), Héctor Andrade, calificó como positivo el balance en el primer día del traslado de pacientes desde el antiguo al nuevo Hospital de Calama.
"Positivo, se ha cumplido con los tiempos y lo que es más importante en la seguridad en el traslado del paciente. Para mañana (hoy), esperamos algo similar dependiendo de que en urgencia ocurra alguna hospitalización", explicó que se trataría de entre 20 y 30 personas a trasladar en el segundo día.
Recalcó que el proceso de instalación en el nuevo recinto de salud pública en la comuna "se ha hecho con seriedad y responsabilidad, en forma paulatina".
Tanto es así, que en el primer día se contempló el traslado de los pacientes de menor riesgo, con la finalidad de establecer la seguridad de aquellos en estado más crítico.
Además se redobló el personal, ya que se mantiene una dotación en el antiguo recinto y otra similar en el nuevo, con el objetivo de cubrir la demanda de todos los pacientes.
Primer paciente
Para el registro, entre los primeros pacientes que fueron trasladados desde el antiguo al nuevo Hospital Carlos Cisternas de Calama, el primero en hacerlo fue el pequeño Liam Gael, que nació de 35 semanas y era uno de los que presentaba alta complejidad por su estado de salud.
La madre del menor, que lo acompaño en todo momento, Yesenia Castillo, contó como enfrentó esta experiencia: "Tranquila y conforme porque ahora va a recibir una mejor atención. Iba a ser trasladado a Antofagasta, pero ahora ya no, entró a esta nueva unidad y ahora a esperar que lo den de alta cuando suba de peso".
La ambulancia que traslado al lactante fue la que encabezó la caravana, y la incubadora fue el primero en ingresar como paciente hospitalizado en el centro de salud pública de la comuna.
Liam fue recibido con globos y con el equipo completo de especialistas de la UTI de neonatología. El infante llegó en buenas condiciones y quedó registrado en la historia de este traslado.
Este resulta ser uno de los servicios con el cual no contaba el hospital antiguo y que ahora permite ser solucionado en el servicio de salud.
Gloria Cabrera: 21 años en el hospital
Con 21 años en el antiguo Hospital Carlos Cisternas de Calama, la médico infantil, Gloria Cabrera, quien junto a otras colegas preparaba el traslado al nuevo recinto en donde comenzó a funcionar ayer pediatría, señaló que "con sentimientos encontrados porque estamos dejando un hospital en donde he pasado gran parte de mi vida, y alegría porque vamos a un hospital nuevo en donde vamos a poder ofrecer lo mejor de nosotros en un moderno recinto de salud".
Lidia Pizarro. Me dan ganas de llorar
Para las integrantes de la Red de Mujeres de El Loa, de acuerdo a lo manifestado por Lidia Pizarro esta iniciativa ha significado un tremendo sacrificio, y una lucha permanente para concretar este anhelado proyecto en la comuna, donde debieron de enfrentar distintas etapas, entre las cuales cuando las obras quedaron paralizadas por la quiebra de la empresa ejecutora, donde ella con un grupo de personas se reunió en las nuevas instalaciones para orar por una solución. Ahora con las obras concluidas, expresó que "siento una emoción muy linda, en verdad me dan ganas de llorar de ver que todo esto es una realidad para Calama".
Jaime Vargas: Más de tres décadas
Con más de tres décadas prestando servicio en el área administrativa en el hospital de la ciudad, Jaime Vargas, a cinco años de jubilarse en forma definitiva, reconoció que era uno de los más antiguos en este cambio, donde aseguró que tiene alrededor de cuatro procesos similares, aunque era sin duda el de mayores dimensiones: "Por una parte alegría y por otra tristeza porque era como una segunda casa, y alegría porque nos vamos a un sector nuevo, más cómodo , con más tecnología. Son sentimientos encontrados, ya que ahora cuando recorremos las instalaciones se nota poca gente y más vacío. Toda una vida, de la escuela me vine a trabajar acá".
Ana Ardiles: No escondió la emoción
Con 20 años en el hospital, la funcionaria de esterilización, Ana Ardiles, no escondió la tristeza que le significó iniciar el cambio del antiguo al nuevo recinto de salud pública. Con mucha emoción, señaló que "siento una nostalgia increíble porque fueron procesos largos para llegar a lo que estamos viviendo en este momento. La alegría por un lado y la tristeza por otro porque nunca pensamos que íbamos a tener esto, se habían puestos tantas piedras -en el camino-, y ahora es una realidad".
Nora Rojas: Tristeza y alegría al partir
Hasta el último día permanecerán las Damas de Rojo en el hospital de la ciudad, tal como da cuenta una de las voluntarias, Nora Rojas, quien con dos décadas de prestar sus servicios de información y de apoyo a los familiares de los pacientes internados, manifestó sentirse en este minuto con sentimientos encontrados: "Es una cosa muy linda, todo al principio cuesta. Me da pena porque llevamos muchos años acá, conocemos todo el sistema administrativo que se desarrolla al interior. Pero también alegría porque llegaremos a un lugar que contará con modernos servicios para los pacientes que requieren de una mayor y mejor atención".