Karen Cereceda Ramos
Esta semana desde la gobernación provincial de El Loa se anunció el inicio de las labores de retiro de escombros, limpieza y desinfección del sector de la toma de Frei Bonn que se incendió el 10 de septiembre pasado.
Una labor complicada considerando el volumen de escombros que hay que recoger y también, los 80 pozos negros que estaban allí, los que eran utilizados como baños por las familias que residieron en ese lugar desde 2013 hasta el día del incendio.
Este es un trabajo que requiere de varios recursos tanto humanos, maquinaria, productos químicos, entre otros. Costos, que según las estimaciones de la gobernadora provincial de El Loa, María Bernarda Jopia, sumarán los $200 millones.
La autoridad provincial comenta que este es un monto inferior a lo que se había proyectado al inicio de la emergencia. Dice que en esa oportunidad se cotizó este trabajo con una empresa la que les cobraba $1 mil 500 millones.
"Para el gobierno, para el Estado era una cifra muy importante y empezamos a separar los ítems de tal manera de conseguir máquinas, de conseguir estos insumos y ver cómo podía cada una de las personas, a quien le solicitamos ayuda, a aportar de tal manera que esta cifra bajó ostensiblemente", detalló Jopia.
En ese sentido, ejemplificó que las maquinarias pesadas fueron aportadas por el municipio de Calama y también se gestionó con servicios públicos que tengan este tipo de vehículos como el ministerio de Obras Públicas (MOP).
Agregó que aquí también hay aportes de empresas de la zona, quienes están trabajando coordinadamente en la limpieza de dicho lugar.
La gobernadora dijo que los escombros que se están recogiendo son trasladados hasta el vertedero municipal, lugar donde se habilitó una excavación profunda de amplio perímetro, el que luego será cubierta.
En cuanto a los plazos en los que durarán estos trabajos, Jopia recordó lo anunciado días anteriores, respecto de que no hay apuro ni un plazo definido para la ejecución.
"La verdad es que no estamos apurados, sino que queremos cumplir con todas las normas y queremos también que este desalojo sea lo más amigable posible", puntualizó.
Salud
Dijo que este trabajo es importante debido a la polución que se genera, la que no solo afecta a las familias que siguen viviendo en la toma, sino que también a los que residen en los alrededores, por lo que hizo un llamado a la prevención.
"Realmente el polvillo es muy invasivo (...) queremos que la gente pueda resguardarse, que puedan resguardar a su familia, sus enseres apreciados para que no se vean afectados", explicó la autoridad.
Jopia quiso desmentir algunos rumores que surgieron, respecto a que, durante la remoción de escombros, se ha encontrado droga e incluso, cuerpos humanos enterrados.
En este sentido, dijo que todo era falso y que, hasta el momento, el único hallazgo fue una escopeta que tenía su serie borrada y que se encuentra en manos de la fiscalía de Calama.
Pasos a seguir
María Bernarda Jopia dice que la intención del gobierno es que el desalojo se haga de la manera más "amigablemente" posible, en el que se espera utilizar la fuerza pública sólo como último recurso.
Explicó que su idea es que antes de las fiestas de fin de año, las familias que residen en los barrios aledaños puedan disfrutar, sin el temor y la inseguridad que les genera a ellos la existencia de la toma de Frei Bonn.
"Nos encantaría poder cumplir con ese compromiso, queremos que diciembre sea un mes distinto para los cientos de familias que viven alrededor. Que puedan disfrutar los espacios públicos, que puedan salir con sus familias a celebrar el Año Nuevo a compartir con un ponche tal vez, el día de la Navidad, un chocolate, unas galletas. Cosas que no han hecho durante seis años", manifestó la gobernadora.
Recordó que el terreno en el que se erigió este asentamiento ilegal tiene dos dueños. Uno de ellos es Bienes Nacionales y el otro es el municipio de Calama.
Explicó que el terreno de Bienes Nacionales y donde iniciará la primera etapa del desalojo es el que se ubica en el sector de calle Colonia y el del municipio es por calle Frei Bonn, por lo que el incendio quemó casas de ambos lugares.
Respecto a la cantidad de viviendas, según el catastro que se realizó antes del incendio, habían 1 mil 80 personas, distribuidas en 300 familias y viviendas y de esas sólo 53 son chilenas.
Del total de las familias fueron 70 las que ya abandonaron el lugar, tras el siniestro.
comenzó a levantarse este asentamiento ilegal en Calama. Poco a poco las familias se instalaron con carpas, para luego empezar a levantar casas de material ligero. 10 de septiembre de 2018 fue la fecha del incendio que se inició en una de las viviendas de la toma de Frei Bonn, ubicada en el sector poniente de Calama. Fueron 70 las familias las que perdieron su casa y sus enseres y que ya no viven ahí.