Calle deprimente
Hay veces en que llego a un terminal de buses que está calle Santa María entre Ramírez y Vargas, a dos cuadras de la plaza principal, y puedo observar que ese tramo es deprimente, pese al esfuerzo de vecinos por recuperar su sector.
Hay varias construcciones abandonadas, hay indigentes y "fumones" por los alrededores que deambulan como "zombies". La suciedad está por toda la calle, con desechos y basura.
Me parece impresentable que a pocas cuadras del centro tengamos una calle tan abandonada y que hasta da miedo transitar por ella, aunque sea a plena luz del día.
David Fuentealba
El ADN de Chile
Si uno lee la historia de Chile se encuentra con un choque cultural terrible, por un lado los invasores, orgullosos de su civilización considerando impuros y bestias a los nativos, rebajándolos incluso bajo la línea de ser humano, y por otro el orgullo mapuche, guerreros de estirpe que jamás estarían dispuestos a convivir con la raza invasora.
Durante décadas en continuos combates se tomaron rehenes a las mujeres, hechas cautivas fueron violadas, sometidas y esclavizadas. Con suerte algunas volvían a sus comunidades de origen con el estirpe de haber sido mancilladas, jamás un cacique tomaría por esposa una mujer abusada por españoles ni mucho menos un español haría lo suyo con la herejía de una de las suyas tomadas por un indio, así fueron parías que se agravaban en el caso de haber tenido un hijo de esas vejaciones.
Décadas y décadas de violencia hasta el pacto de Quilín, único acuerdo de paz entre los españoles con algún pueblo originario, a partir de ahí hubo un mestizaje menos traumático.
Si analizamos estos hechos y reflexionamos en profundidad, creo que podemos entender varias taras de nuestra idiosincrasia, el temor a ser considerado indio, el arribismo, la exclusión social, pero a la vez esa resiliencia, esa soberbia de hacerle frente a las más duras condiciones. Jamás verás a un pobre desolado, muchas veces su entereza es admirable.
Mauricio Hernández Aliaga
Fanatismo
Así como se están dando las cosas "gracias" al fanatismo incontrolable de los inadaptados de siempre, una actividad tan hermosa como lo es el fútbol, se estaría viendo reducida, a una simple cancha para los jugadores y para el público en casa, a una simple pantalla de TV. Cada "gol" de nuestro equipo, lo celebraríamos en familia incluyendo al perro y al gato, en cambio en un estadio las alternativas de celebración son mayores.
El actual de los "fanáticos" resulta incomprensible y hasta absurdo, pues hay que ser muy "masoquista" para pagar una entrada para sufrir.
Jorge Valenzuela Araya
Horas extras
Los organismos públicos son operados por funcionarios cuya misión - se supone - es servir a los ciudadanos. Sin embargo, muchos servidores asumen una actitud de propietarios de dichos organismos y miran como clientes cautivos a sus mandantes, que somos los contribuyentes. Sintiéndose dueños de las entidades donde laboran, mejoran sus ingresos hasta alcanzar niveles impresentables. Además, suelen confundir atribuciones con poder y pasan a ejercer una autoridad que nadie les ha conferido, de modo que ya es un clásico del trámite chileno el encontrarse con tiranuelas o tiranuelos ejerciendo tras ventanillas o mesones de atención de "público".
Lo extraordinario que han traído las medidas de transparentar la gestión de los organismos estatales y gubernamentales no es la obligada exposición de documentos y datos oficiales, sino la total indiferencia de los autores y responsables de las irregularidades reveladas por estas medidas. Esa indiferencia yace en la certeza que la desidia y la mala atención son inmunes a los sumarios administrativos, y en el hecho que el dueño del cascabel perdió todo interés en los gatos… una manifestación más del síndrome del Estado Ausente.
Ciudadano tramitado
¿Celebra Navidad?
Si es así, entonces es usted un ser humano que reconoce a la persona de Jesús, el Cristo. Esto significa que no solo lo imagina naciendo en un pesebre allá en Belén de Judea (Israel) sino que usted es una persona que le ha abierto la puerta de su corazón para que el reine en su vida.
Este Jesús es el que declara que ha venido para que en Él tengamos todo aquello para llevar adelante nuestra vida, aquella que Él mismo nos ha otorgado.
"Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia".
Jaime Barrientos Proboste