Agricultores cifran en 300 hectáreas perdidas producto de la mostaza negra
PREOCUPACIÓN. Asociación de Agricultores de Calama advierte un progresivo avance de la maleza que pone en peligro la actividad. El sector poniente es el más afectado por un problema que dicen ya lleva cerca de ocho años.
La preocupación quedó de manifiesto luego que el presidente de ASAC, Von Castro, explicara que "son cerca de 300 las hectáreas de producción agrícola que se han perdido producto del avance de la mostaza negra, principalmente en sectores como Cerro Negro, Chunchuri y parcelas de Aconcagua, al poniente de la ciudad", explicó el dirigente de los agricultores locales.
Expansión
Según Castro, "desde el año 2010 a la fecha, esta maleza ha avanzado con total fuerza, y es precisamente en esta época cuando florece y sus semillas se propagan con facilidad debido a las oscilaciones del viento, las altas temperaturas y lo fácil de su propagación, lo que ha hecho una tarea extremadamente compleja de contener, y ni pensar de erradicar de los cultivos".
Otra de las preocupaciones que el titular de la Asociación de Agricultores manifestó es que "desde que el Instituto Nacional de Desarrollo Agropecuario (INDAP), iniciara una serie de estudios relativos a esta plaga, se nos recomendó el uso de dos químicos: Glifosato y Finese, pero por lo que hemos podido averiguar estos herbicidas, con el tiempo y su uso constante son altamente cancerígenos, por lo que mantenemos otra importante preocupación en su uso".
Carta
Para abordar esta problemática, "la cual ya se está expandiendo a ciertos sectores de La Banda, Topáter y Lay Lay, enviaremos una carta al Consejo Regional, para ponerles en conocimiento de la situación y solicitarles apoyo para que haya un tratamiento permanente a esta maleza, al menos en su contención, porque es imperativo el poder atajar su nocivo impacto en los cultivos de pasto, alfalfa y maíz. En esa misiva esperamos una respuesta y con ello el retomar el combate a esta maleza", agregó Von Castro.
"En algunos cultivos de predios al interior de Calama ya hemos detectado que la mostaza negra sigue expandiéndose. De hecho en una terraza un agricultor de Chiu Chiu debió cortar la raíz de una de estas malezas que tenía un largo de 1,8 metros; ejemplo claro de la fuerza con que se arraiga y que puede alcanzar si no se le interviene. Por ello esperamos que las gestiones que efectuemos den respuesta pronta a esta situación", agregó el agricultor.
Von Castro hizo un llamado a la comunidad a "no comprar los llamados ramos de 'ilusión polaca', arreglos que las personas creen que son florales para ser instalados en las tumbas y sepulcros de los cementerios locales, lo que ayuda a su propagación con mayor rapidez".
Agregó que "una buena medida para hacer contención, sería poder contar con cuadrillas que las saquen de los predios, y que apoyen su combate mientras se trabaja en una solución definitiva a su propagación. Y que evite que más hectáreas de terreno agrícola sigan sufriendo con esta invasión y por ende la pérdida de predios destinados o que califican para la producción agraria en Calama y la provincia de El Loa. Urge retomar el combate a esta maleza y que según la experiencia en los Estados Unidos, demora un mínimo de siete años. Y ya hemos perdido bastante tiempo en ello", reflexionó el agricultor.
A la espera de una respuesta
A los estudios realizados, la entrega de químicos paliativos para atajar la mostaza negra y contar con un plan definido de su combate los agricultores también esperan por una respuesta de la secretaría regional ministerial del ramo. Ante ello este medio intentó obtener una versión acerca de esta situación, pero problemas de agenda del titular de la cartera impidieron consignar el parecer de la autoridad con respecto a esta situación.
Un serio problema de contención a la mostaza negra advierte la Asociación de Agricultores de Calama (ASAC), producto del avance progresivo de esta maleza, la cual no ha podido ser combatida de forma eficaz en la comuna -y la provincia-, debido a sus características invasivas y de fácil propagación, poniendo en peligro la producción agraria en la zona.