Corte de agua en Osorno abre el debate sobre sistema de concesión
PARLAMENTARIOS. Destacaron la necesidad de mayores sanciones.
El prolongado corte de agua potable que afecta a Osorno por más de una semana, tras un derrame de petróleo en uno de los estanques de Essal, compañía a cargo del suministro en esta comuna, abre el debate respecto a que si la decisión de concesionar el vital elemento en Antofagasta fue la correcta.
Recordemos que en 2003, la entonces Empresa de Servicios Sanitarios de Antofagasta (Essan), fue concesionada por 30 años al Grupo Luksic (Antofagasta plc). Sin embargo, esta empresa solo la mantuvo hasta 2015, año que vendió los derechos al Grupo EPM, la que además ya anunció el año pasado su decisión de vender la sanitaria (la concesión vence en 2033).
Posturas
El senador Pedro Araya, señaló que en el caso de la región, concesionar el agua fue una muy mala decisión, pues todas las inversiones sanitarias se habían hecho con cargo de los gobiernos regionales, a diferencia de lo que pasaba en otros lugares de Chile donde se debía hacer una fuerte inversión, que el Estado no estaba en condiciones de realizar.
"Particularmente en el caso de Antofagasta, y se lo manifestamos al Presidente Ricardo Lagos en su minuto, que no se justificaba la concesión, debido a la alta rentabilidad que tenía Aguas Antofagasta, cuando era Essan", declaró.
El diputado Esteban Velásquez (FRVS), recordó que durante el gobierno del Presidente Lagos, en Calama se opusieron a esta medida e incluso se movilizaron por este motivo.
"Essan era una empresa rentable, que no le provocaba ninguna pérdida al Estado, al contrario, era tan rentable que yo creo les generaba ganancias. Sin embargo, este modelo privatizador de algunos gobiernos, desde la dictadura hasta gobiernos de la oposición, lo privatizaron en el fondo. Le llaman concesión, pero al final es una privatización", indicó.
Velásquez destacó la importancia de revisar todo el modelo de concesiones. Y mientras se realiza, de modificar las regulaciones.
"Hoy las regulaciones son escasas y hemos sabido que las multas a las que se exponen, que podrían ser las máximas, son irrisorias", destacó.
El senador Alejandro Guillier (Indep.), considera que hay ciertos bienes que son de todos los chilenos, y que el agua se puede entregar en concesión, pero condicionado a su uso racional y en función de un plan que tenga una validación social y no para la especulación como dice ocurre en Chile, similar a lo que pasa con las pertenencias mineras.
"Tenemos que recuperar el agua y además tiene que ser en función de una explotación donde haya inversión. Si va a ingresar un privado, yo no tengo problema, pero es condicionado a prestar un servicio y este tiene que ser con un estándar y si el privado no es capaz de hacerlo, obviamente se le puede retirar la concesión y buscar a otro o hacerse cargo el Estado", manifestó.