Ante la situación que actualmente enfrenta el país y las diversas demandas ciudadanas existentes, hay una que se repite constantemente; la molestia por el valor de la dieta parlamentaria. Por ello, desde hace años se han presentado diversas propuestas para equilibrar las dietas, tanto para diputados y senadores; esto de acuerdo con las exigencias de las funciones legislativas y que además estén acordes a la realidad del país.
En los últimos días se ha debatido la posibilidad de que exista una disminución en ésta, medida de la cual estoy 100% a favor. Incluso lo manifesté en diversas oportunidades durante el proceso de campaña electoral y en las distintas votaciones que hemos llevado a cabo en el Congreso Nacional.
Cuando me han consultado cuanto debíamos ganar, también expresé que no teníamos que ser los parlamentarios quienes pusieran la cifra, sino un órgano externo. Al menos la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, aprobó que sea el Banco Central el que defina nuestros sueldos y que también pueda fijar las remuneraciones de los altos organismos del Estado.
Por otra parte, hay que entender que la rebaja de la dieta no arreglará los problemas del país de un día para otro, pero si es un valioso gesto que significará ponernos en sintonía con la ciudadanía y con las demandas. Hoy más que nunca, los más altos directivos de la administración pública y quienes servimos al Estado, entendemos que la labor pública no es para enriquecerse, sino para contribuir por el bien común de toda la sociedad.
Es importante que la gente comprenda y sienta que estamos y seguiremos trabajando por mejorar las demandas ciudadanas; como las bajas pensiones de los adultos mayores, el aporte previsional solidario, el ingreso mínimo garantizado y los aspectos tan importantes como son la salud, a través del seguro de enfermedades catastróficas y la situación de los medicamentos, entre otras medidas.
En lo inmediato, aprobamos la Ley de Estabilización, para congelar el alza en las cuentas de la luz, situación donde manifesté mi preocupación desde el primer minuto, debido a que la región sería la más perjudicada por estos nuevos costos. Ante ello, la Superintendencia de Electricidad y Combustible (SEC), ofició a las empresas eléctricas para que ajusten sus tarifas y reembolsen lo que corresponde a cada hogar.
La situación de la dieta parlamentaria es un gesto, pero habla de querer mejorar el país con medidas concretas y a corto plazo.
José Miguel Castro,
Diputado