El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, expresó ayer en Río de Janeiro su confianza en que el Mundial de 2014 en Brasil será un éxito, aunque advirtió que todavía falta mucho trabajo para que los estadios estén listos en diciembre, como exige el organismo rector del fútbol.
Valcke hizo los comentarios al final de una gira de inspección de algunas de las 12 ciudades sede de la Copa del Mundo. Aseguró que la FIFA está "más tranquila" sobre el avance en los preparativos del país, pero agregó que "definitivamente, todavía falta mucho trabajo" para asegurar que las seis sedes que faltan estén listas este año.
El secretario general dijo que ahora que empezó la venta de boletos ya no hay margen para realizar cambios y advirtió que Brasil está obligado a tener las 12 sedes listas.
"El punto de inflexión fue el 19 de agosto, cuando empezamos la venta de boletos", dijo. "Estamos vendiendo boletos para los 12 estadios, así que eso significa que habrá partidos en los 12 estadios. Ya pasó el momento para hablar de tener 11, 12 ó 10 estadios. Tendremos 12 ciudades sedes y 12 estadios", agregó,
Valcke, el funcionario de la FIFA responsable de supervisar los preparativos de Brasil, dijo que la organización de la Copa Confederaciones en junio sin problemas mayores le dio confianza a la FIFA de que el Mundial será un éxito. Esto, a pesar de que algunas delegaciones, como la de España, se quejaron contra la organización y por las dependencias.
"El resultado de la Copa Confederaciones fue fabuloso. No estoy hablando de que Brasil ganó la Copa Confederaciones. Estoy hablando sobre la organización en sí. El apoyo de los fanáticos, el hecho que los estadios estuvieron llenos, que pudimos resolver cualquier problema que enfrentamos", comentó Valcke. "Te da la confianza para decir, "sí, la Copa del Mundo será un éxito"".
Valcke dijo el miércoles que organizar el torneo en Brasil ha sido más difícil que en otros países. Sin embargo, insistió en que el éxito de la Confederaciones ayudó a reducir la tensión.
"Sí, estamos más relajados", afirmó. "Todavía hay mucho trabajo que hacer, pero estoy seguro que será fabuloso para Brasil, para la FIFA y para todos los involucrados. No hay duda que será exitoso".
La construcción de los estadios todavía es motivo de preocupación.
"No estamos listos. No podemos jugar el Mundial mañana, porque todavía tenemos que trabajar en seis estadios, y tenemos que realizar mejoras en las seis ciudades", reconoció.
Valcke dijo que quiere evitar los problemas que surgieron durante la Confederaciones, cuando sólo dos de los seis estadios estuvieron listos en la fecha fijada por la FIFA.
"Hay una fecha límite. Faltan unos cuantos meses, unas cuantas semanas para fines de diciembre. (Tenemos que) asegurarnos que podamos realizar estos eventos de prueba, para evitar los problemas que (enfrentamos) en la Copa Confederaciones con la entrega tardía de algunos estadios".
Uno de los mayores rezagos está en Curitiba, donde se determinó dejar la construcción de un techo retráctil para después del torneo, pues esto impediría su inauguración en los plazos.
"Definitivamente aún tiene mucho trabajo por hacer (...) Hay un límite de tiempo, quedan un par de meses, un par de semanas para el fin de diciembre", afirmó.
Valcke le pidió también al Gobierno de Brasil que tome las medidas para incrementar el número de vuelos entre las sedes donde se disputará el campeonato, para reducir el número de escalas.
Proponen cambio en sistema de elección
Jerome Valcke dijo que para evitar problemas de atrasos como el brasileño, le gustaría se requiriera la aprobación de políticos al más alto nivel como parte de la propuesta de países que esperan ser anfitriones de la Copa del Mundo. "Es una buena idea porque generaría un apoyo nacional, en comparación con solamente una propuesta presentada por una asociación miembro acompañada de garantías gubernamentales", afirmó, al tiempo que agregó que una medida así le daría a la propuesta más legitimidad ante los ojos del público.