Aproximadamente 9 sismos de baja y mediana intensidad fueron registrados durante el día de ayer, la mayor parte de los epicentros se suscitaron al interior de la Primera región y hacia la comuna de San Pedro de Atacama y Ollagüe. Sin embargo, el movimiento telúrico ocurrido a las 8:50 de la mañana de ayer, tuvo lugar en Pica a unos 40 kilómetros de profundidad, un fenómeno inusual para la zona y por ello el Centro Sismológico Nacional (CSN) está estudiando las razones.
"El temblor de 5.2 grados en la escala de Richter y que fue percibido en la comuna de Calama con epicentro al sur de Pica, ocurrió a una profundidad que nos pareció un poco extraña. Porque no es una actividad habitual para la zona en que se detectó, porque uno esperaría que en esa zona ocurran sismos bajo los 80 kilómetros de profundidad. Por lo tanto, estamos estudiando el fenómeno para entender qué es lo que puede estar sucediendo allí, por ser inusual esta actividad" explicó, Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional.
A pesar de este poco común movimiento telúrico en la zona norte, la actividad sísmica que se desarrolla es común, ya que Chile es un país sísmico donde se espera que constantemente esté liberando energía; a causa del movimiento de la placa de Nazca y continental.
Sin embargo, desde julio del año pasado el CSN ha detectado que en las cercanías de Iquique, se activaron tres regiones importantes que han aumentado su actividad sísmica, donde se han desencadenado muchos temblores de mediana intensidad hacia abajo.
De los sectores detectados, uno de ellos tuvo mucha actividad sísmica, justo en la costa norte frente a la capital de la Primera región durante el mes de julio, mientras en los meses de diciembre y enero aumentó en la costa pero hacia el sur en la zona de Punta Patache y en las últimas semanas se han desarrollado muchos sismos en la costa sur de Arica.
"Estos son los únicos tres lugares del norte, dónde hemos detectado un aumento de la actividad sísmica, concentrando una seguidilla de temblores que están siendo monitoreados constantemente", agregó Barrientos.
Es así como los temblores que se han detectado en las cercanías de San Pedro de Atacama y Ollagüe, son parte de la actividad normal que tiene la provincia. Porque son sismos de baja y mediana intensidad, los cuales tienen un epicentro a mucha profundidad, los cuales no son preocupantes.
A pesar de este aumento de sismicidad en la zona norte, no podría catalogarse como un enjambre sísmico, ya que según explica el director del CSN, para que sea considerado como tal debiera suscitarse una seguidilla de temblores de una intensidad equivalente, ninguno se destacará por su magnitud frente al resto y además debe ocurrir principalmente en la misma región y en el mismo sector. Por lo tanto, aún no tenemos este tipo de fenómeno tanto en nuestra región, como en nuestra provincia.
"Por eso es importante estudiar muy bien dónde están ocurriendo los temblores, así como qué los provoca y su intensidad. Porque dependiendo de dónde ocurran podremos calcular su nivel de daño, por ello cuando hablamos de temblores de considerable magnitud pueden variar de los 5 grados Richter a los 7 y sobre él" aclaró, Barrientos.