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Embalse de Conchi es capaz de resistir un terremoto grado nueve

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A raíz del terremoto 8.2 ocurrido en el extremo norte y que alertó a la comuna de Calama, afectando su normal funcionamiento, ya que la intensidad del movimiento telúrico fue de VI grados en la escala de Mercalli, lo que implicó que se desatara la alerta local y se constituyera a los pocos minutos el COE provincial.

A raíz de lo anterior las autoridades locales decidieron visitar el Embalse de Conchi, porque representa una real amenaza para la comuna, ya que su eventual desborde o rotura provocaría un desastre de alta envergadura. Sin embargo, la Dirección General de Agua (DGA) informó que la estructura de este embalse está construida para resistir un sismo de nueve grados en la escala de Richter.

El recorrido por las instalaciones del Embalse de Conchi fue encabezado por el gobernador Provincial y el alcalde de la comuna, pero también asistieron la Oficina de Protección Civil, la Dirección de Obras de la municipalidad, carabineros y militares, quienes fueron guiados por el administrador del embalse, el cual depende de la DGA.

En conjunto visitaron en terreno el puente del embalse, donde el administrador Edward Araya, les explicó el funcionamiento de este y las características estructurales que tiene la estructura y las razones de por qué el embalse no sufrió ninguna variación a raíz del terremoto de Iquique.

"El tranque actualmente tiene una capacidad de 22 millones de metros cúbicos y en estos momentos estamos con 15 millones 700 m3, pero además cuenta con medio millón más por razones de seguridad. Y su estructura está preparada para soportar un sismo grado nueve, por lo que el terremoto ocurrido no provocó alarma para nosotros, sin embargo se activaron los protocolos de seguridad y se detectó que no huno alteraciones", manifestó Araya.

El administrador también aclaró que esta estructura tienes características semirrígidas, las cuales están revestidas con cobre y permiten que la estructura no se trice o se rompa fácilmente.

El gobernador de la provincia El Loa, Claudio Lagos, precisó que quedó muy tranquilo al constatar en terreno el estado del embalse. "Hemos comprobado en terreno que esta estructura es muy fuerte y la comunidad debe estar tranquila. Ya que no hubo desprendimiento de ningún tipo, ni menos fractura y la ribera del embalse se mantuvo en óptimas condiciones, resistiendo bien el sismo", comentó.

Además el gobernador manifestó que se realizará un estudio para medir los posibles daños que causaría el embalse al romperse. De esta manera se calcularían más precisamente los tiempos de llegada del agua a las zonas pobladas, así como también se entregarían las herramientas para gestionar mejor los planes de emergencia y prevención.

Según se estima actualmente, si el agua del embalse se libera río abajo se demoraría entre una hora 45 minutos en llegar a Calama, 45 minutos hacia Lasana y un poco más a Chiu Chiu. Sin embargo se necesitan números certeros.

El alcalde de la comuna Esteban Velásquez, indicó que es importante hacer siempre las visitas preventivas, por ello es necesario gestionar los recursos para hacer el estudio de cauce de las aguas en el caso de desborde del embalse o rotura por un sismo mayor a nueve grados. Y de esta manera, determinas las vías de evacuación de la comunidad río abajo.

Según indica el administrador del Embalse, hace algún tiempo se corrió el rumor de una supuesta rotura, por ello precisó que esto es totalmente falso y no existe ninguna grieta en la estructura que contiene actualmente los más de 15 millones de metros cúbicos.

"La grieta que existe es pequeña y se formó en el rompe olas que está al borde el embalse, el cual se edificó posterior a la puesta en marcha de este tranque hace 39 años. Ya que en el mes de septiembre el viento levanta el agua y salpica a los bordes, lo que era peligroso. Pero la contención de este embalse no depende de la estructura del rompe olas", explicó Araya.

Agregó que la ciudadanía puede estar tranquila, porque hoy el embalse está en perfectas condiciones y mucho más preparados para un eventual desastre.

La experiencia del año 2001 los dejó una enseñanza en los técnicos, dijeron.