Resguardar los derechos de los consumidores
Si las empresas no cumplen, los consumidores tienen derecho a reclamar y a ser indemnizados.
Ante una situación de emergencia como la ocurrida tras el terremoto que afectó principalmente a las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá, las empresas deben ser profesionales y otorgar mayores facilidades para resguardar la seguridad de sus clientes.
Si bien los sismos son eventos impredecibles, Chile es un país que enfrenta estas emergencias por lo tanto, en caso de alguna situación excepcional, como puede ser un movimiento telúrico, una alarma de bomba o un incendio, las empresas deben ser profesionales y contar con protocolos y políticas destinadas a asegurar el pleno respeto de los derechos de los consumidores, especialmente su derecho a la seguridad en el consumo y a la protección de su integridad física.
Si las empresas no cumplen con cualquiera de estas obligaciones, los consumidores tienen derecho a reclamar y a ser indemnizados y compensados por todos los daños causados, de acuerdo a lo que determinen los tribunales competentes.
Por ejemplo, en relación a los cortes e interrupciones de servicios de agua potable, electricidad y de telefonía, las empresas deben velar por reponer dichos servicios a la brevedad y no efectuar cobros durante el periodo en el que éste estuvo suspendido.
Además, las empresas deben disponer de canales de comunicación expeditos y de atención inmediata para conocer las necesidades de sus clientes de manera de dar una respuesta y solución lo más pronto posible.
Así también, en el caso del transporte, las empresas deben informar oportuna y adecuadamente a los consumidores sobre las formas de recuperar sus pasajes o reagendar los viajes.
En el caso de seguros contratados, las compañías debieran ofrecer el camino más corto para hacerlos efectivos, por ejemplo cuando existen daños en viviendas u otros bienes producto de un sismo de esta naturaleza.
Ahora si un consumidor tiene créditos, es recomendable que se fije en sus estados de cuenta y se asegure por ejemplo si un seguro contra incendios tiene cobertura ante este evento.
Con la seguridad de los consumidores no se juega y menos en una situación de emergencia, por lo que por ejemplo los centros comerciales también se suman a esta necesidad de ser profesionales y resguardad la integridad de sus clientes.