Se aprecia un despertar de la zona Alto El Loa y tanto el Consejo de Pueblos Originarios como autoridades de la provincia intentan dar un auge a este sector. Pero para ello las comunidades de la zona están colocando ciertos conceptos que consideran claves para avanzar.

Ellos piden transversalidad, representatividad y participación. Premisas que se repiten en toda la sociedad chilena en el último tiempo para poder lograr el desarrollo.

El Alto Loa está conformado por atacameños y quechuas que habitan la Cuenca del río del mismo nombre con una población que no superaría las mil personas y que mantienen el uso de sus tierras y aguas ancestrales, para producir recursos propios del altiplano.

Entre ellas destacan las localidades de Caspana, Conchi Viejo, Lasana, Ayquina, Turi, Cupo, Toconce, San Francisco de Chiu-chiu, San Pedro Estación y Ollagüe.

Son alrededor de 12 mil kilómetros cuadrados de territorio que tiene un potencial tan importante como la comuna de San Pedro de Atacama.

Hoy en día se analizan una serie de iniciativas para esa zona, pero se requiere buscar consensos que permitan avanzar en el objetivo de poder potenciar este sector en todas las áreas, pero sin afectar las tradiciones y conciliar el progreso con aspectos tan sensibles como el medio ambiente, protección del patrimonio y de los recursos naturales, entre otros.

El desafío es grande, pero se requiere de la voluntad de todas las partes y de la capacidad de poder buscar primeramente el bienestar de los pobladores que han estado arraigados toda una vida en el sector.

Será necesario apertura y una visión amplia para no entramparse en aspectos individuales con el fin de dar un auge a esta zona.

Si no se interviene con un plan integral, esta zona seguirá agonizando. Para ello es clave trabajar en conjunto con las comunidades y poder generar el despegue del Alto Loa que tiene un gran potencial de desarrollo principalmente turístico y que hasta ahora no se ha sabido aprovechar.

Con la globalización no solo hemos podido acceder a nuevas tecnologías que son sin duda de gran aporte en nuestro diario vivir, sino que también se ha podido acceder a nuevas disciplinas en relación a la medicina y bienestar emocional, en la cual cada vez más personas están dispuestas a complementar sus tratamientos con diferentes técnicas relacionadas con la medicina holística y en comprobar cómo la naturaleza ayuda al bienestar general.

La acupuntura, los imanes y las flores de bach están dentro de las técnicas mayormente utilizadas, las cuales existen hace muchos años no obstante se están masificando cada vez más en nuestro país el cual era un poco escéptico a este tipo de prácticas pero que en otros países como Australia y cuba son tan cotidianos y parte de la cultura como país. En cuba cuando se va al médico aparte de las medicinas propias de la disciplina igualmente se realiza terapia con flores de bach, debido a la creencia que las emociones son las que enferman al cuerpo.

Las vibraciones emocionales positivas nos hacen estar sanos, en cambio las vibraciones negativas relacionadas con el estrés, la depresión y problemas emocionales en general nos hacen bajar las defensas y por lo tanto estar más propensos a las enfermedades.

Por lo que comenzar a enfocarnos en sanar las emociones no es algo descabellado, obviamente hay personas que no creen en este tipo de tratamientos no obstante están avalados mundialmente, y no presentan contraindicaciones.

Para encausarme en mi columna relacionada con los problemas de aprendizaje los tratamientos con flores de bach han dado muy buenos resultados en el tratamiento de niños con Trastorno de déficit atencional. Incluso existen libros como 'Terapia floral para niños de hoy' ejemplar escrito por las Hermanas Céspedes, las que exponen los beneficios de la terapia floral en el tratamiento de diferentes dificultades emocionales, adaptación escolar, agresividad, problemas de autoestima y de concentración que afectan a los niños.

Es importante darnos cuenta que los alumnos vienen de diferentes ambientes familiares e interacciones las que pueden beneficiar o perjudicar su bienestar.