Hay dos parques que son parte de nuestra vida cotidiana: El Parque José Saavedra más conocido como 'Los Lolos' y el Parque El Loa. Pronto se sumarán otros como el Parque de avenida Granaderos y el Parque Periurbano, ambos en construcción.
Este es un paso importante para el desarrollo y una mejor calidad de vida para los calameños, pero al mismo tiempo tenemos el desafío de preservar estos espacios públicos y sobre todo velar para que ellos cumplan el propósito para que fueron creados. Hay que recordar que no hace mucho tiempo, el Parque Los Lolos fue cercado para proteger el edificio interior que está destinado al desarrollo de las artes, principalmente para jóvenes y los sectores poblacionales de la ciudad.
Al mismo tiempo los jóvenes han hecho de este espacio un refugio para el skate, el ciclismo acrobático, entre otros.
Lamentablemente se sabe que hay grupos que irrumpen en el lugar para el consumo y venta de drogas, lo que hay que evitar a toda costa.
Estos lugares están destinados para una recreación sana, para disfrutar con la confianza que estamos seguros. Por eso, la vigilancia en esos sectores a determinadas horas es clave.
Tenemos que recuperar los parques y usarlos para acciones positivas para que los estudiantes le saquen provecho para que los adultos puedan distraerse y tener espacios al aire libre donde puedan recrearse.
Debemos sacar todo el provecho posible a estos espacios y buscar la manera de que sean bien utilizados por la comunidad. Es decir, deber ser un sitio de esparcimiento para la comunidad y no un dolor de cabeza para los vecinos que viven en los alrededores.
Todos tenemos la tarea de defender nuestros parques, de velar que ellos sean útiles para la comunidad, que estén bien conservados, que se realicen actividades masivas para que la población los visite y que tengan una adecuada infraestructura para que resulte un agrado visitarlos.