Una medida acertada se ha realizado con la poda de árboles en algunos sectores de la ciudad. Pero creemos que no sólo debe ser para mejorar la visibilidad de las cámaras de televigilancia, sino que además deben venir aparejadas otras medidas de seguridad.
Hay avenidas en que los árboles añosos y frondosos se convierten en un riesgo.
En primer lugar, porque obstruyen las luminarias y oscurecen el sector. Además, muchos árboles son un peligro por los fuertes vientos. Se suma a ello que dificultan el trabajo de las cámaras de televigilancia y además son un riesgo para camiones y buses de dos pisos, junto con ser un obstáculo para poder mirar las señales de tránsito.
Es importante que el Departamento de Aseo y Ornato de la Municipalidad, considere todos estos aspectos al momento de realizar las podas.
De esta manera los árboles junto con ser un pulmón para la ciudad, serán una apreciada especie para embellecer y ornamentar la ciudad, y no un estorbo, como ocurre en muchos casos.
Además es necesario inculcar en la población el respeto y el cuidado de estas especies.
Los árboles son un aporte importante para la calidad de vida de una ciudad, pero también debe velarse que estén ubicados en los lugares correctos, que sean las especies adecuadas y que estén bajo un constante cuidado.
Es importante que este trabajo se esté realizando permanentemente y se vigile cada especie, junto con destacar que con esta labor podremos vivir más tranquilos y seguros, junto con poder desplazarnos sin preocupaciones por calles donde se levantan grandes árboles que hermosean la ciudad.
El árbol es vida, y tenemos la obligación de cuidarlos y también alertar cuando alguno se convierte en un peligro para la población.
Calama es una ciudad privilegiada que posee cientos de árboles que embellecen esta nortina ciudad y que fomenta permanentemente una mayor plantación de estas especies.