En una acalorada sesión de concejo municipal, y sin estar como punto en la tabla correspondiente a la jornada de la tarde, ayer se presentó en el salón de honor del municipio local, el director del hospital Carlos Cisterna de Calama, doctor Enrique Castro, para informar con relación al destino de los 200 millones de pesos entregados por la casa consistorial en abril pasado, para la adquisición de una nueva caldera, dos incubadoras y una unidad de cuidados intensivos pediátrica.
Al respecto, el médico informó que debido a la lenta y burocrática normativa estatal que el sistema de salud tiene a nivel nacional, donde una ley del Estado impide al hospital de Calama recibir donaciones en dinero, debió realizarse un largo proceso a través de la Subsecretaría de Salud hacia el Ministerio de Hacienda para que ésta autorizara finalmente la recepción de la donación.
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En espera queda la forma en que los gastos de dineros serán informados, debido a que al ser fondos entregados a través de subvención municipal, éstos deberían rendirse al 31 de diciembre del presente año, tarea que quedó a cargo de la dirección de Control y Gestión y la asesoría jurídica del municipio local, las que deberán determinar el procedimiento para rendir los 200 millones de pesos que fueron otorgados pensando en la gran cantidad de necesidades y falencias que tiene presenta el centro asistencial.