Cáncer de piel: ese silencioso y maligno enemigo detrás del sol
OBJETIVO. Altos índices de radiación ultravioleta y la presencia de la vaguada costera inciden de manera significativa en el aumento del número de afectados por este mal en la zona.
Chile es uno de los países más expuestos a la radiación solar en el mundo. Si bien esa condición puede ser una gran ventaja en el ámbito de la producción de energía limpia y renovable, es al mismo tiempo un factor de riesgo que aumenta las posibilidades de contraer cáncer a la piel. Sobre todo en esta época, cuando los índices de rayos ultravioleta son extremadamente altos.
En efecto, cada año se diagnostican unos tres millones de casos de esta enfermedad en el planeta y la Organización Mundial de la Salud estima que una persona muere cada sesenta minutos, como consecuencia directa o indirecta de algún tipo de mal asociado a la exposición abusiva al sol.
Si bien en nuestro país no existe un registro oficial, la Fundación Arturo López Pérez calcula que la tasa de incidencia del cáncer a la piel es de 230 casos por cada 100 mil habitantes y que se producen 36 mil casos nuevos por año. En esa línea, la Sociedad Chilena de Dermatología estima que en los últimos 20 años más de cuatro mil chilenos han muerto debido a complicaciones asociadas al cáncer de piel, de los cuales el cincuenta y cuatro por ciento son hombres.
A lo anterior hay que añadir que durante la última década el número de diagnósticos de este mal se ha incrementado en un cien por ciento, concentrándose en las regiones de Valparaíso, Antofagasta y Santiago. Estas tres zonas son las que, además, exhiben los registros de mortalidad más altos del país como resultado de fallecimientos por melanomas y carcinomas, que son las variantes más graves de la enfermedad.
"Si bien la de Antofagasta presenta el indicador más alto (3,2 casos por cada cien mil habitantes), lo cierto es que esa cifra incluye cánceres de piel provocados por acumulación de arsénico. Eso implica que allí la cifra de muertes asociadas a la radiación solar es inferior a la que presenta Valparaíso, que con 2,01 casos por cada cien mil habitantes es, en términos técnicos, la región que hoy exhibe el registro de mortalidad por cáncer de piel más alto a nivel nacional, muy por encima de Santiago, que le sigue con un 1,04", revela el director del Departamento de Dermatología de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso, Antonio Guglielmetti.
Causa y tipos
El cáncer de piel se produce como resultado de mutaciones en el ADN de las células expuestas a los rayos ultravioleta que contiene la luz solar y otras fuentes emisoras de luz, como son las lámparas de bronceado artificial. Es más frecuente en personas de piel clara, dado que estas poseen menos melanina, pigmento que contribuye a otorgar mayor protección contra el sol, que es más abundante entre las personas de piel oscura, y que se concentra en las capas superiores de la epidermis.
Los tipos de cáncer de piel más habituales son los carcinomas espinocelulares y basocelulares, que son relativamente benignos si son diagnosticados y tratados a tiempo, y el melanoma, menos común que los otros pero mucho más agresivo. También hay otras variantes mucho menos frecuentes, entre los que destacan los sarcomas y linfomas cutáneos.
Sin embargo, el melanoma es el más maligno de todos ellos, al punto que cobra la vida del cinco por ciento de las personas que lo padecen.
Vaguada costera
El médico y profesor de la Escuela de Medicina de la UV advierte que en la región de Valparaíso, en particular en las ciudades situadas en su borde costero, la situación es más peligrosa que en otras zonas del país debido a la conjunción de dos variables: el alto índice de radiación solar que registran sus cielos, sobre todo durante primavera y verano, y la presencia de la vaguada o neblina costera.
Al respecto, agregó que la gente es más consciente del índice de radiación, porque los asocia a la presencia del sol. Sin embargo, acotó, con la vaguada es distinto, porque al producirse cree que ésta protege del sol, siendo que apenas filtra un 5 % de su radiación. Entonces como las personas no ven el sol y sienten menos calor, no se cuidan ni usan bloqueadores, ropa o sombreros, lo que incrementa el daño en su piel", afirma.
Por tal motivo, el doctor Guglielmetti recomienda evitar exponerse al sol entre las 11 y las 16 horas y usar filtros o bloqueadores solares en forma permanente en esta época, especialmente en los días en que hay vaguada.