Las peleas de parejas que llegan a los golpes son cada día más frecuentes en Calama, pese a las campañas preventivas impulsadas por las autoridades locales y regionales, y así quedó reflejado el fin de semana pasado, luego que se conocieran dos nuevos casos de violencia intrafamiliar ocurridos en la ciudad.

El primero de ellos tiene una particularidad, debido a que en esta oportunidad la víctima fue un hombre de 54 años, el cual fue agredido por su mujer de 38 años, tras que esta última, quien se encontraba en estado de ebriedad, lo golpeara sin razón alguna.

Carabineros informó que el hecho ocurrió en un domicilio de la calle Federico Errázuriz la madrugada del día sábado pasado, mientras el afectado se encontraba durmiendo en su pieza, cuando su esposa ebria llegó a molestarlo y sin previo aviso comenzó a pegarle combos en diferentes partes de su cuerpo, para luego rasguñarle la cara, lo que provocó que el hombre llamara a Carabineros para denunciar el delito.

Los efectivos policiales llegaron hasta el lugar y al comprobar la veracidad del hecho, detuvieron a la agresora. En tanto, la víctima resultó sólo con lesiones leves.

otra agresión

El segundo de los casos sucedió la mañana de ayer en un inmueble del sector oriente de Calama, más específicamente en la calle Salar Pampa Blanca, cuando un hombre de 34 años agredió a su polola de 26, luego de tener una discusión de índole sentimental.

La pareja comenzó a discutir, producto de los celos y aquello fue subiendo en intensidad. La mujer trató de refugiarse en el baño de la casa, hasta donde llegó el ofuscado hombre, empujando violentamente a su conviviente, quien cayó dentro de la tina, golpeándose fuertemente el hombro.

La víctima llamó a Carabineros, quienes llegaron raudamente al lugar y tras entrevistarse con los involucrados, tomaron detenido al agresor y la mujer llegó al hospital para constatar lesiones, siendo diagnosticada con heridas de carácter leve.

Los robos y asaltos están siendo cada vez más violentos en Calama, incluso los delincuentes están utilizando armas de fuego para intimidar a las víctimas y no tienen ningún problema en ocuparlas cuando ellos creen que es necesario.

Fue exactamente lo que le sucedió a un joven de nacionalidad boliviana de 24 años, el cual fue abordado por una pandilla de ocho delincuentes, quienes lo golpearon y le dispararon en una de sus piernas para sustraerle 200 mil pesos en efectivo y darse a la fuga del lugar.

pandilla

Según los antecedentes policiales del caso, el hecho delictual ocurrió a la 1:30 de la madrugada del día de ayer en la intersección de la calle Hernán Cortés y la avenida Granaderos, cuando el hombre se dirigía a su casa.

El boliviano caminaba por la calle Hernán Cortes con dirección al oriente y al llegar al terminal de buses ubicado en el lugar, fue abordado sorpresivamente por un grupo de ocho antisociales, quienes sin previo aviso comenzaron a propinarle golpes de pies y puños en diferentes partes de su cuerpo.

El afectado trató de defenderse y zafar de la paliza que le estaban propinando, lo que ofuscó al líder de la banda delictual, quien de entre sus vestimentas sacó un arma de fuego y le disparó en la pierna derecha al extranjero, quien cayó al suelo producto del impacto de bala.

Los delincuentes aprovecharon ese instante para registrar a la víctima, robándole 200 mil pesos en efectivo que portaba en ese momento, para luego darse rápidamente a la fuga del lugar, sin que nadie se percatara del violento hecho delictual.

Grave Lesión

El malherido hombre se puso de pie, pese al fuerte dolor que tenía y se dirigió por sus propios medios a la urgencia del Hospital Carlos Cisternas de Calama, donde fue atendido de inmediato por el médico de turno, quien le diagnosticó lesiones de carácter grave, pero sin riego vital, siendo intervenido, quedando internado para ver la evolución de la herida a bala.

En tanto, el carabinero que se encontraba de turno en el hospital local tomó conocimiento del caso del boliviano, entrevistándose con él, quien le contó cómo ocurrieron los hechos y el afectado realizó la denuncia correspondiente.

El efectivo policial informó del hecho delictual a sus superiores, quienes ordenaron realizar un patrullaje preventivo por el sitio del suceso, no dando con el paradero de los jóvenes pistoleros, pero seguirán buscando a las pandillas de delincuentes loínos que están alterando la seguridad pública en Calama.

Un extraño episodio fue el que se vivió la madrugada de ayer en la urgencia del Hospital Carlos Cisternas, luego que cerca de las 2:30 de la madrugara, llegara hasta el recinto de salud un joven de 19 años, con heridas de perdigones en diferentes partes de su cuerpo.

Según los datos aportados por Carabineros, el herido llegó solo al hospital local y solicitó la asistencia médica, ya que tenía diversas lesiones en su cuerpo.

Una vez en el box de atención, el especialista de turno se percató que tenía lesiones atribuibles a un disparo de escopeta, por lo que informó al efectivo policial que se encontraba de turno en el lugar.

El carabinero habló con el joven, pero éste se negó a entregar información de cómo había resultado herido, dejando un gran enigma policial.

El malherido hombre recibió las curaciones pertinentes y se fue del lugar sin realizar una denuncia.

Carabineros presume que se trataría de un ajuste de cuentas de bandas rivales, pero al no haber denuncia, no se puede iniciar un proceso investigativo que los lleve a dar con los involucrados.