Una camioneta del año, la cual pertenece a una empresa que presta servicios mineros, resultó totalmente quemada, tras incendiarse en extrañas circunstancias.

Según los antecedentes entregados por Carabineros, el trabajador de la empresa Isotron a cargo del vehículo, luego de concluir su jornada laboral regresó a su domicilio y estacionó el motorizado en el frontis como cada día.

Incendio

Pero cerca de las 6 de la madrugada del día de ayer, el trabajador minero sintió ruidos extraños que provenían del exterior del inmueble y al salir a ver qué sucedía, se percató que la camioneta marca Chevrolet modelo D-Max de color rojo estaba siendo consumida por el fuego, alertando del hecho a Bomberos.

Varios voluntarios de la Segunda compañía de Bomberos de Calama llegaron hasta el sitio del suceso y extinguieron las llamas, que a esa altura ya habían consumido gran parte del vehículo avaluado en más de 10 millones de pesos.

Al tratarse de un automóvil del año, Bomberos realizó diferentes peritajes, con la finalidad de descubrir si el incendio comenzó debido a una falla eléctrica o fue provocado por un tercero, informe que en los próximos días debería estar listo.

Los delincuentes cada día buscan blancos donde el dinero en efectivo sea más fácil de sustraer, siendo uno sus objetivos preferidos los conductores de los taxis colectivos, hecho que quedó demostrado cuando un colectivero calameño de 79 años resultó con lesiones graves al frustrar el robo del vehículo con el cual recorre a diario las calles de la ciudad y es su única fuente de trabajo estable.

Según los antecedentes policiales del suceso, el delito fue cometido a eso de las 10 de la mañana del día viernes pasado por una pareja de jóvenes, quienes provistos de un arma blanca intentaron quedarse con el automóvil utilizado como del transporte público.

acto heroico

El afectado le comentó a Carabineros que se desplazaba por el sector poniente de la ciudad realizando su recorrido habitual, cuando en la esquina de la avenida Prat con calle Frei Bonn un hombre y una mujer lo detuvieron, y le preguntaron si podía realizar un servicio especial, a lo que él accedió.

Una vez arriba del vehículo la joven pareja le solicitó al chofer que se dirigiera al sector de Likantatay, por lo que emprendió el rumbo a ese lugar.

Cuando llegaban al destino, el hombre le solicitó al conductor que detuviera por un momento el auto y fue ése el instante que esté aprovechó para abalanzarse sobre el panel del vehículo para sustraer las llaves, por lo comenzó un forcejeo entre el antisocial y el colectivero, mientras la cómplice del asaltante sólo observaba la situación.

Pero para la suerte del abnegado trabajador loíno, justo en ese momento pasó por el lugar un camión, por lo que éste comenzó a pedir ayuda, lo que provocó el enojo del ladrón, quien de entre sus vestimentas extrajo un cuchillo con el cual le propinó un profundo corte en uno de los brazos, para luego descender del motorizado junto a la mujer y huir del lugar a pie.

Los ocupantes del vehículo de carga auxiliaron a la víctima, trasladándola hasta la urgencia del Hospital Carlos Cisternas de Calama, donde fue atendido por el médico de turno, quien le diagnosticó una lesión de carácter grave.

El facultativo informó de la situación al carabinero que estaba de guardia en el recinto de salud, quien se entrevistó con el valiente colectivero, acogiendo la denuncia, para iniciar una investigación policial respecto de los hechos.

El afectado fue dado de alta y se encuentra recuperándose satisfactoriamente en su domicilio particular.

Con el paso de los años, los calameños se han convertido en personas individualistas y que no se preocupan de la vida en comunidad, pero todavía hay gente que valora la vida de barrio y quienes viven a su alrededor, como es el caso de un hombre de 33 años, quien al regresar a su casa ubicada en el sector poniente de la ciudad, se percató que de la casa del vecino venía saliendo un desconocido portando diversas especies de valor.

Esta situación le pareció muy rara, por lo que le consultó al personaje si era familiar del vecino, pero éste no contestó y trató de darse a la fuga, siendo alcanzado por el valiente ciudadano, quien se dio cuenta que se trataba de un ladrón.

Tras realizar la detención ciudadana, el buen samaritano llamó a Carabineros para que se lo llevaran detenido. Una vez en el lugar, los efectivos policiales acreditaron el delito, ya que el delincuente portaba en el interior de una mochila dos notebook y diversas joyas, las cuales fueron reconocidas por el afectado, quien además agradeció a su vecino por tan heroico acto de solidaridad.

El antisocial fue llevado a la 1ª comisaría, donde se comprobó que ya tenía antecedentes penales. Posteriormente, fue puesto a disposición de la justicia local.