Policías buscan intensamente al otro involucrado en el asesinato del carabinero
antecedentes. El imputado de 21 años confesó su participación en los hechos, pero nego ser el autor de los disparos. El Gobierno y la institución policial se querellaron en contra de quienes resulten responsables.
Una extenuante jornada fue la que se vivió en la región de Antofagasta el día de ayer, debido a que en las ciudades de Calama, Tocopilla y Antofagasta se desarrollaron diferentes actividades relacionadas con el asesinato del suboficial de Carabineros, Rigoberto Candia Pérez (47), quien perdió la vida tras recibir tres disparos a quema ropa cuando realizaba una fiscalización en el poblado de Ollagüe, crimen que enlutó a todo el país.
Carabineros de El Loa logró la detención de uno de los sospechosos, el cual se encuentra bajo custodia policial, pero el segundo de los participantes en el delito, quien además había sido el autor de los disparaos, sigue siendo buscado intensamente en la zona, aunque no se descarta que haya cruzado la frontera por un paso no habilitado y se encuentre buscado refugio en una ciudad boliviana.
justicia
Pasado el mediodía, en el Juzgado de Garantía de Calama, se realizó la audiencia de control de detención del único imputado por el delito de homicidio del suboficial Candia, individualizado como O.A.V. P. de 21 años, quien confesó su participación en el crimen del funcionario policial, pero no fue formalizado por el delito, debido a que el magistrado Diego Gamboa amplió el plazo de privación de libertad hasta el próximo día domingo 1 de marzo a las 11 horas, donde debería ser formalizado por el cargo de homicidio de un carabinero en servicio.
Por medidas de seguridad, el imputado fue trasladado al Centro Penitenciario de la ciudad de Antofagasta, donde deberá ser recluido mientras se soluciona su situación judicial.
El fiscal a cargo del caso, Raúl Marabolí, comentó que "se amplió la detención del imputado hasta el día domingo a las 11 de la mañana cuando se realicen los controles de detención. Solicitamos esto porque hay varias diligencias que se están desarrollando en el sitio del suceso y en los distintos laboratorios de Carabineros, de los cuales estamos esperando los informes preliminares, al igual como de la autopsia del funcionario policial abatido".
En estos momentos los esfuerzos están puestos en encontrar a criminal que se encuentra prófugo y nuevas pistas o antecedentes que relacionen la muerte del suboficial Candia con el tráfico de drogas existente en El Loa.
"En una primera instancia el imputado confesó los hechos y además existe la participación de un segundo sujeto que está siendo intensamente buscado por Carabineros. Él no confesó que disparó, si no que lo habría hecho el segundo individuo que es buscado por las policías", agregó el persecutor judicial.
El fiscal Marabolí aclaró que no está descartada la participación de terceros, pero hasta el momento sólo se está ubicando a una segunda personas. Además dijo que en la audiencia del domingo pedirán la prisión preventiva para el imputado, ya que representa un gran peligro para toda la sociedad.
otras aristas
La mañana de ayer en el Juzgado de Garantía de Calama, también fueron presentadas dos querellas criminales contra quienes resulten responsables en esta misma causa, las cuales fueron acogidas y leídas por el magistrado Gamboa durante la audiencia de control de detención.
Una fue interpuesta por la gobernación provincial de El Loa y la otra por Carabineros de Chile y el ministerio del Interior, las cuales buscan que los responsables de la muerte del mártir 1.180 de la institución policial tenga sanción.
El gobernador de la provincia de El Loa, Claudio Lagos, enfatizó que "vamos a perseguir a los culpables, porque en el país no va a quedar impune la muerte de un carabinero, porque hay que pensar en la gran labor que ellos cumplen diariamente, en lugares extremadamente alejados, por lo que es muy detestable ver los crímenes que se cometen contra ellos y más encima con resultado de muerte. Como Gobierno nos golpeó de manera muy dura y vamos a solicitar las penas más duras para los responsables".
Antofagasta
En tanto, la autopsia del suboficial Candia, se realizó en Antofagasta por tratarse de un caso de alta complejidad y duró cerca de dos horas, tiempo en que los especialistas determinaron que la causa de muerte fue un traumatismo craneoencefálico y un traumatismo raquimedular por proyectil balístico de tipo homicida.
La directora (S) del Servicio Médico Legal de Antofagasta, Ximena Albornoz, explicó que "las balas dieron en la zona de la cabeza, tórax y cuello, lo que le provocaron una muerte casi instantánea por el grave daño en la estructura del cerebro y el compromiso pulmonar".
Tras que acabaran las pericias forenses, el cuerpo del carabinero fue entregado a sus familiares, pero antes de que sean llevados a su ciudad natal de Tocopilla, la institución realizó un sentido responso en la Catedral de Antofagasta, el cual estuvo presidido por el general director de Carabineros de Chile, Gustavo González Jure y diferentes autoridades regionales.
"He querido estar presente en Antofagasta para acompañar a la familia y bridarles el apoyo y las condolencias de la institución, especialmente de este general director. También he querido estar en terreno, para visitar el lugar donde ocurrieron los procedimientos para interiorizarme de los detalles de cómo ocurrió el procedimiento en sí", puntualizó el general director de Carabineros de Chile.
La máxima autoridad de Carabineros una vez finalizada la ceremonia religiosa, se dirigió hasta la localidad de Ollagüe para conocer de cerca lo sucedido y las extremas condiciones que tienen que lidiar a diario los efectivos policiales que resguardan la frontera.
Hoy en la ciudad de Tocopilla se realizaran los funerales del suboficial Candia, donde participarán autoridades nacionales y regionales, quienes le darán el último adiós a este desafortunado servidor público.
"En una primera instancia el imputado confesó los hechos y además existe la participación de un segundo sujeto que está siendo intensamente buscado por Carabineros. Él no confesó que disparó".
Raúl Marabolí
Fiscal a cargo del caso
Es un delito que atenta contra la vida de las personas, que consiste en que un individuo provoca la muerte de una persona con la concurrencia de circunstancias como alevosía, premio o recompensa remuneratoria, por medio de veneno, con ensañamiento, aumentando deliberadamente e inhumanamente el dolor del ofendido y con premeditación conocida. Este gravísimo delito se sanciona con la pena de presidio mayor en su grado medio a presidio perpetuo (de 15 años y un día a presidio perpetuo).