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un estudio asegura que cruzar los dedos ayuda a evitar el dolor

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El acto de cruzar los dedos está asociado a atraer la buena suerte o, si la persona coloca la mano atrás, simboliza una promesa que no se va a cumplir. Sin embargo, este gesto también puede evitar el dolor, ya que envía una señal al cerebro para someterlo a una especie de ilusión.

Así lo afirma un estudio realizado por el University College de Londres y publicado en la revista Current Biology. El documento explica que el "mensaje" que recibe el cerebro es que uno de nuestros dedos se está quemando, cuando en realidad está expuesto a una superficie fría.

Este efecto, conocido como la "ilusión de la parrilla térmica", consiste en someter a los dedos índice y anular a una temperatura aproximada de 40º C y al dedo medio a una temperatura más fría, de unos 20º C.

Esto genera una sensación paradójica en el dedo medio que siente un calor muy doloroso, cuando en realidad está expuesto a una temperatura fría. Esto se logra, por ejemplo, sumergiendo los dedos en agua a esas temperaturas.

Cuando la persona coloca el dedo medio sobre el índice, la ilusión de la parrilla térmica desaparece.

"La parrilla térmica es muy útil en la comprensión científica de dolor. Utiliza un estímulo controlado con precisión para activar los sistemas cerebrales del dolor. Esto en realidad no implica ningún daño a los tejidos", explicó Angela Marotta, del Instituto de Neurociencia Cognitiva de Londres, citada por el portal ABC.

La parrilla térmica produce las sensaciones de quemazón ante un estímulo frío debido a la interacción de tres vías nerviosas que informan al cerebro sobre el calor, el frío y el dolor. La temperatura cálida en los dedos índice y anular bloquea la informacion que normalmente llegaría al cerebro por la exposición del dedo medio al frío en solitario.

Hipótesis El cerebro recepciona un "mensaje" que le indica que los dedos se están quemando, cuando en realidad se exponen a una superficie fría.

Concepto La "parrilla térmica" implica que se someten los dedos índice y anular a una temperatura de 40º C, y el dedo medio a una más fría de 20º C.

expertos desmienten que el tamaño de las porciones influya en la obesidad

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A través de un estudio, un grupo de investigadores de la Universidad de Connecticut (EE.UU.) desmintió que el tamaño de las porciones influya en la cantidad de alimentos que una persona ingiere y que como consecuencia desarrolle obesidad.

Según los expertos, las señales visuales no son universalmente eficaces para ayudar a prevenir esta enfermedad en la infancia.

"Se ha supuesto que los consumidores con sobrepeso u obesidad son más propensos que otros a subestimar el tamaño de una ración de alimentos y, en consecuencia, comen en exceso, especialmente cuando la comida se presenta en un plato o recipiente grande", dijo Lance Bauer, profesor de psiquiatría de la institución norteamericana y uno de los miembros del equipo.

El investigador sostuvo a través de un comunicado que por esa razón "se recomienda con frecuencia que estos consumidores usan platos más pequeños para derrotar a la ilusión".

Bauer y su equipo consultó a un grupo de niñas adolescentes acerca de su percepción del tamaño de las porciones. A juicio de los investigadores, los resultados son sorprendentes.

"El estudio encontró que las adolescentes con sobrepeso u obesidad estaban menos atentas que las niñas con peso normal a las señales visuales de diferentes tipos", dijo Bauer.

"Este hallazgo sugiere que el cambio del tamaño de las vajillas puede ser menos eficaz de lo que pensábamos. También sugiere que la presentación de los mismos mediante planillas detalladas que resumen reglas de la dieta o la cantidad de calorías podría también ser menos eficaz de lo que nos gustaría", añadió, en referencia a los carteles de prevención de la obesidad que ilustran platos saludables o tablas calóricas.

"Los resultados del estudio implican que la educación dieta para adolescentes con sobrepeso u obesidad debe ser clara, sencilla, repetida y muy interesante", concluye Bauer.

Origen

Los investigadores realizaron el estudio sobre la base del mito que afirma que las personas con obesidad se tientan más con porciones y platos grandes.

Resultado

Contrario a lo que se cree, los autores concluyeron que las niñas que sufren obesidad no se ven afectadas por las señales visuales del plato.

ejercitarse durante la adultez puede prevenir el cáncer

fitness. Un estudio dice que el deporte mejora la salud cardiovascular, lo que disminuye el riesgo de padecer ciertos tipos de esta enfermedad.

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Un estudio publicado en JAMA Oncology asegura que las personas de mediana edad que realizan ejercicios pueden tener un menor riesgo de padecer cáncer de pulmón y colorrectal, en especial los hombres. Este hallazgo se suma a uno de los tantos beneficios relacionados con la práctica del deporte.

La especialista Susan G. Lakoski, quien fue una ex atleta profesional y actualmente pertenece a la Universidad de Vermont en Burlington (EE.UU.), encabezó la investigación, que también relacionó los niveles de estado físico en los adultos con un menor riesgo de muerte después de la detección del cáncer y enfermedades cardiovasculares.

Este estudio es el primero en mostrar que la capacidad cardiorrespiratoria predice la incidencia de ciertos tipos de esta enfermedad, una de las principales causas de mortalidad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

"Entre los hombres que desarrollaron cáncer, los que estaban más en forma en la mediana edad tenían un riesgo menor de morir de los tres tipos de cáncer estudiados, así como de enfermedad cardiovascular", explicó Lakoski.

En declaraciones al sitio Medscape Medical News, la investigadora agregó que "incluso una pequeña mejora en el estado físico marcó una diferencia significativa en la supervivencia, lo que reduce el riesgo de morir de cáncer en 10% y por enfermedad cardiovascular en 25%".

"Entiendo la importancia de permanecer comprometidos con una rutina de ejercicio regular", manifestó Lakoski en referencia a su pasado como atleta, y añadió que "conozco mis límites y lo difícil que es esforzarme, basándome en mis pruebas de fitness previas, cuestión que defendemos en este estudio".

resultados

El estudio indagó los datos de 13.949 hombres que se sometieron a un examen médico integral, una evaluación de riesgo cardiovascular y una prueba de esfuerzo. La edad promedio de los participantes fue de 49 años, y los tipos de cáncer analizados fueron el de pulmón, próstata y colorrectal.

Los resultados arrojaron que durante un periodo de 6,5 años, 1.310 hombres desarrollaron cáncer de próstata, 200 tuvieron cáncer de pulmón y 181 desarrollaron cáncer colorrectal.

Los varones que tuvieron una alta capacidad cardiovascular durante la mediana edad redujo en 55% el cáncer de pulmón y 44% el cáncer colorrectal.

Si bien no se estableció una relación entre el fitness y el cáncer de próstata, "es posible que los hombres con mayor capacidad cardiovascular tienen más probabilidades de someterse a exámenes más frecuentes de atención médica preventiva y/o exámenes de detección, y tienen una mayor oportunidad de ser diagnosticados con cáncer de próstata localizado que los hombres con menor capacidad cardiovascular".

Sin embargo, Lakoski agregó que los hombres que desarrollaron cáncer de próstata tuvieron un menor riesgo de morir por cáncer de última instancia o enfermedad cardiovascular, al tener mayores niveles de condición física antes del diagnóstico.

"Esto habla de la importancia de estar en forma a mediados de la vida para mejorar la supervivencia, incluso si en las últimas instancias un hombre en desarrolla un cáncer de pulmón, de próstata o colorrectal en el futuro", aseguró la especialista.

Si bien el estudio de Lakoski puso énfasis en los hombres, el Instituto Nacional del Cáncer en EE.UU. asegura que las mujeres que realizan ejercicios por cuatro horas o más a la semana tienen un riesgo más bajo de padecer cáncer de mama. Según la entidad norteamericana, el efecto del ejercicio puede ser mayor en las mujeres premenopáusicas con peso corporal normal o bajo, lo que supone un llamado a cuidar la salud alimenticia para prevenir la obesidad.