Honradez y decencia... siempre
Esteban Velásquez Núñez,
Hoy más que nunca comparto la idea de construir y redactar una nueva Constitución, a través de una Asamblea Constituyente. Se trata de fundar verdaderos cimientos de políticas y actitudes que tengan la probidad y el servicio público como motivaciones, con un marco regulatorio y drásticas sanciones que inviten al 'usurpador' y al 'ladrón' a marginarse del ámbito público, a pensarlo muchas veces si cree que desde la política se llenará los bolsillos de dinero o beneficiará sus intereses personales y de sus cercanos.
Desde el 'pelafustán' que acomoda a su señora en algún cargo político hasta el que corre a pedir dinero, sin asco a cualquier empresa.
El servidor público llega para servir y no a servirse de la gente, quizás son una quimera estos dichos, pero quienes creemos en ella y la practicamos, seremos defensores siempre de este estilo de hacer política. Transparencia y probidad pública siempre.
Los escándalos a nivel nacional, que tienen a la política y el dinero como centro del debate, permiten tomar un respiro y convencerse aún más lo importante que son las palabras honradez y decencia.
Esta administración municipal ha tenido como motor estos valores, sin aceptar contubernio alguno, por el contrario, marginar cualquier acto o persona que se desvíe del verdadero rumbo del trabajo en pos de los ciudadanos calameños.
Hoy día nos viene a la mente las enseñanzas de nuestros padres, abuelos, maestros que expresaban, 'no importa lo que ganes, pero que sea honradamente'. Mi reconocimiento a todos aquellas personas que hacen de estas enseñanzas su forma de vida.
Las ciudades también son mejores cuando sus ciudadanos son de altos estándares éticos y cada uno asume responsablemente su proceder, así cada generación recibe los mejores frutos para vivir estadios superiores de convivencia. Que todos tomemos las banderas de la honestidad y decencia en el ánimo de hacer a este oasis calameño más noble y digno, lejos de cualquier sinvergüenzura.