CTC llama a paralización por la Reforma Laboral del Gobierno
contratistas. La Confederación de Trabajadores del Cobre considera que el proyecto beneficia al empresariado y perjudica a los sindicatos y sus asociados.
La Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), liderada por su presidente Manuel Ahumada, acordó respaldar hoy la "Jornada de Movilización y Paralización Nacional Efectiva" convocada por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), en rechazo a lo que consideran "el carácter empresarial de la Reforma Laboral y la decisión de legislar de espalda a los trabajadores", según detalló el presidente provincial de la CUT, José Mardones.
El dirigente, quien además es directivo de la CTC, que posee asociados en las cuatro divisiones del Distrito Norte de Codelco, explicó que la CUT hizo un llamado a paralizar los sectores productivos para lograr "que las indicaciones que hemos hecho a través de los diputados sean incorporadas a este proyecto de ley, para que la reforma tenga también la visión de los y las trabajadoras de Chile y no solo la visión del empresariado".
Mardones llamó a todos los trabajadores a manifestarse contra el proyecto del Ejecutivo, pues a su parecer no favorece a los sindicatos y a sus asociados. "Creemos que este proceso de reforma laboral no tiene que ver con unos trabajadores u otros, es algo más transversal, tiene que ver con todos los trabajadores de Chile", dijo.
El también concejal agregó que además esperan que los sindicatos y trabajadores de Codelco tengan un rol más protagónico en la discusión de la Reforma, pues poseen algunos de los mayores gremios del país. "Siento que ellos están dando la lucha, tuvieron un Congreso Nacional y la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC) tocó la Reforma Laboral y esperamos que ellos, la Zonal, también se puedan sumar a estas movilizaciones y paralizaciones que generaremos, no solamente mañana, sino que durante este mes y el de mayo", detalló.
Entre los puntos sensibles que no serían considerados en el proyecto, detalló Mardones "que exigimos una negociación ramal que no fue incorporada en el proyecto, para que los trabajadores puedan de verdad demostrar su descontento con el empresariado y lograr un proceso de negociación más igualitaria".
Desde la Central, explicaron su posición señalando que "la actual Reforma Laboral mantiene incólumes los pilares del Plan Laboral impuesto en la dictadura y aún más, introduce mayor flexibilidad laboral, limita el ejercicio irrestricto del derecho a huelga y elimina derechos adquiridos en la legislación. Si bien introduce algunos aspectos favorables (titularidad sindical, desaparición grupos negociadores y no reemplazo en huelga), éstos han sido duramente resistidos por el mundo empresarial".