"Niño maravilla del tenis" en búsqueda de la consagración
De calama a Santiago. Emprendió aventura deportiva
La búsqueda de concretar un sueño en algunas ocasiones nos obliga a dejar atrás la seguridad del hogar y la familia. Esta es la realidad que vive por estos días el "Niño Maravilla del Tenis" loíno, Sebastián Andrés Defilippis Neira, quien con algo menos de 13 años cambió por la falta de expectativas la residencia en la capital de la provincia, por la del territorio nacional.
La aventura partió hace algunos meses atrás, en principio por la temporada de vacaciones de verano y en el presente año por algo más que esto, ya que debió optar por una permanencia regular en Santiago acompañado de su abuela.
Sus padres y hermano con residencia en Calama lo visitan en forma periódica, pero este joven tiene claro que para cumplir sus metas tiene que realizar algunos sacrificios como estar alejado de su familia.
Algo más maduro producto de los cambios generados, tanto en su vida personal como aquella que pretende seguir en el mundo profesional del deporte blanco, manifestó que "encontré lo que buscaba, mi pasión", al ser consultado por este paso en la vida.
Extraña a la familia
Asimismo como reconoció que "extraño a la familia, a los amigos más cercanos y compañeros de colegios (Chuquicamata), a los profesores". Pero tiene claro que todo esto es para mejor, ya que en la capital de la provincia El Loa no contaba con los espacios para desarrollarse como profesional en el tenis.
En el último tiempo confidenció que ha jugado cuatro torneos puntuables para el ranking de la Federación de Tenis de Chile en menores de 14 años, en donde consiguió acceder a semifinal, cuartos de finales e incluso quedar eliminado en la primera rueda en la etapa de aprendizaje que esta desarrollando junto a sus profesores, en donde todos los competidores están en la búsqueda de ser los mejores y alcanzar el sueño de representar alguna vez a Chile en la Copa Davis.
Si bien, planteó que lo más difícil que ha debido afrontar es estar alejado de la familia, también resaltó el hecho de haber avanzado mucho en el plano tenístico y por el momento sus aspiraciones más inmediatas son competir en la categoría sub-14 en la búsqueda de la consagración como una raqueta con futuro en el deporte blanco.
De calama a Santiago
"Para lograr lo que quiero ser -debo estar en Santiago-, es ser tenista" y está dispuesto a cumplirlo sacrificando otros aspectos del diario quehacer, ya que mientras otros adolescentes piensan en pasarlo bien este jovencito loíno está en una escuela especial para deportistas, con una planificación diaria que contempla de lunes a viernes, de 8 a 10.30 horas, clases de tenis; de 10.30 a 12.45 horas, clases regulares en el colegio y de 14.30 a 17 horas, otra vez clases de tenis y preparación física.
El resto del tiempo lo dedica a la recreación, al estudio y también a continuar aprendiendo algo más de la pasión por el deporte blanco, ya asea a través de la lectura o por los canales de televisión.
Mañana comienza desafío
Por el momento, tras un paso por los primeros diez lugares en el ranking de la Federación de Tenis de Chile en menores de 14 años, se encuentra ubicado en la posición décimo segunda, con 294 puntos. Pero, mañana iniciará la participación en un nuevo torneo nacional en donde pretende remontar en dicho escalafón del deporte blanco.