Todo era alegría en las huestes mineras con la llegada de nuevos jugadores hasta que una lesión vino a remecer la pretemporada. El lateral Mirko Opazo, que provenía de Ñublense de Chillán y que fue traido al club por el gerente técnico Boris González llegó ayer con una lesión en su rodilla derecha y de inmediato se definió que un examen de resonancia magnética sea el que defina la magnitud de su lesión, uno que se realizará este próximo martes en una clínica de la ciudad.

Opazo, quien arribó el jueves en la tarde y el viernes ya tuvo la primera práctica con sus compañeros había declarado que venía en buena forma física. Sin embargo, hay dudas de su real condición por lo cual su contrato quedó a la espera de la resolución médica.

En el caso de que el jugador sea desafectado, César Vigevani tendrá que buscar un nuevo jugador por esa banda -se está probando el ex Coquimbo Unido Enzo Guerrero- o simplemente pedir que uno de los que partió a préstamo, el canterano Juan Carlos Araya que estuvo trabajando con él a su arribo a la banca minera retorne a la plantilla para ocupar un puesto que queda en duda.

dos que llegan

Ayer se embarcaron con rumbo a Calama dos de los extranjeros que estarán a disposición del cuerpo técnico a principios de esta semana. Se trata del delantero uruguayo Facundo Peraza y el ex central de Platense y Arsenal de Sarandí, Walter Gómez.

El defensor viene a ocupar la plaza que dejó el paraguayo Ricardo Martínez, tras no llegar a acuerdo con la directiva minera y viene por un año, al igual que el goleador charrúa.

Con esto, César Vigevani sólo tiene pendientes el tema del volante de creación aunque existen opciones de que el quilpuenino Bryan Danesi pase la etapa de prueba y se quede en la institución. Además, en el caso de confirmar la partida de Opazo, el estratego deberá buscar una alternativa en esa plaza.

En el caso del "10", con Danesi serían tres los jugadores del actual plantel que pueden cumplir esa función, considerando además a los canteranos Patricio Troncoso e Iván Ledezma. Pese a que practicó con el plantel, Richard Catrileo no seguiría en la plantilla de este año y tendrá que buscar una opción de ir a préstamo.

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puestos quedan por cubrir en el equipo de Vigevani. El lateral derecho y el volante de enganche.

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de los que partió a préstamo podría volver. Juan Carlos Araya sería alternativa en la defensa.

Enzo Franceso Guerrero es de perfil bajo. Muy distinto al jugador uruguayo Enzo Francescoli por el cual fue bautizado así por su padre. "Mi papá era muy fanático de él y por eso me bautizó así" comenta.

Y de alguna manera fue un presagio porque este ex seleccionado chileno sub 20 terminó volcando su vida al fútbol. Hoy, con 24 años, el espigado defensor que jugara en Coquimbo Unido y conoce a la perfección la categoría en que Cobreloa deberá batirse con otros 15 rivales para alcanzar su soñado retorno a la primera división.

"Hay harta gente joven pero que tiene mucha experiencia, como los que vienen llegando como refuerzos. Se está armando un buen equipo y efectivamente es un plus a favor el jugar con gente joven porque cuando uno juega como volante de contención, por ejemplo, como me tocó alguna vez a mi con Gustavo Huerta como entrenador, ya tienes a dos rivales encima apenas recibes. Se corre mucho acá y creo que puedo aportarle ese despliegue a este equipo".

Guerrero, que llegó sólo a Calama y se puso inmediatamente a entrenar asume que "ya pasé el período en que la altura afectada y me adapté. Me gusta la idea de trabajo que tiene el cuerpo técnico y siento que Cobreloa puede ser el gran animador del torneo que todos esperan que sea".

El "Tata", como lo bautizaron en su natal Andacollo no esconde la motivación que representa estar en Calama y pelear por quedarse en la institución. "Para mí siempre fue un sueño llegar a Cobreloa y de alguna forma lo estoy cumpliendo. Este es un equipo grande que tiene que retornar a primera división y el grupo que trabaja hoy acá lo sabe".

Guerrero es lateral zurdo aunque también ha actuado cubriendo la banda derecha en sus años en Coquimbo.