Cobreloa jugará frente a la Universidad de Chile mañana a las 20 horas en el Estadio Nacional el duelo de vuelta por los cuartos de final de la Copa Chile, donde tiene una tarea titánica, dar vuelta el 2-0 en la ida en Calama, en un resultado cargado de polémica.

La carga de partidos del elenco minero será demasiada. Entre la semana que pasó y ésta, deberá afrontar tres cotejos en seis días (dos por Copa Chile ante la "U" y uno por el campeonato de la B ante Barnechea el pasado fin de semana). Si estiramos esto hasta este fin de semana, serán cuatro duelos en 11 días, porque el domingo se medirá con Puerto Montt como local en el Zorros del Desierto.

Esta situación tiene complicado al cuerpo técnico de los naranjas, quienes ven cómo con el plantel corto que dispone, tiene que afrontar ambas competencias, donde cada partido -más encima- significa una verdadera final, en la que cualquier tropiezo (como el ocurrido frente a los azules en Calama- te deja colgando del precipicio.

Es por eso que el director técnico de los loínos, el argentino César Vigevani, tiene en su mente la posibilidad de dosificar frente a la "U" en la revancha, dándoles descanso a varios elementos que no han parado hace días de trabajar y enfrentar desafíos de máxima complejidad y presión.

En la declaración que dio el estratega frente a los micrófonos del programa radial "En la línea" culminado el duelo ante Barnechea, mencionó que "en el segundo tiempo había jugadores que no daban más" y que por aquello hay una alta probabilidad de que descansen en el partido frente a la "U", aunque aquello signifique resignarse a quedar fuera.

Redacción

De muy poco o -tal vez- de nada podrían servir las expresiones de arrepentimiento, tanto del preparador físico de Cobreloa, Gerardo Piersanti, como del portero del equipo, Jorge De Olivera, quienes una vez concluido el duelo de ida de Copa Chile ante la "U" en Calama, manifestaron ante los micrófonos de la prensa su molestia por el gol legítimo no cobrado a los naranjas cuando se jugaba el minuto 59 del partido, en instantes en que el marcador aún estaba en blanco.

Como el desenlace fue desfavorable para los locales, el enojo era total en la hinchada y se traspasó a parte del cuerpo técnico y jugadores. El PF y el golero no tuvieron filtro, por lo que deberán presentarse hoy en las oficinas del tribunal de penalidades de la ANFP.

Está claro que al menos en el caso de Piersanti, la mano se le puede venir muy dura, por el tono seco y directo de sus declaraciones, cuando tuvo que asistir a la conferencia de prensa, debido al castigo de una fecha que recibió el DT César Vigevani, por el lío con el "Chiqui" Cordero en el partido de ida con la Universidad Católica en Calama.

Piersanti no se guardó nada y en su molestia disparó que "lo que más nos duele es la mano negra, porque uno se queda desesperanzado. Parece que esto no se llama Copa Chile, sino Copa Colo Colo-U. ¿Para qué estamos participando, si nos meten la mano en casa? Es una gran tristeza", dijo el jueves 15 de octubre en conferencia.

Acto seguido continuó con que "pelearemos con todo ante Barnechea, porque no sé si jugaremos ante La U, ¿para que nos choreen? Quizás ni vamos. Que jueguen entre ellos y se mientan entre ellos. No trabajamos para estas injusticias".

Al día siguiente, el preparador físico se desdijo de sus expresiones y pidió disculpas públicas, que quizás sean tomadas en cuenta por la Asociación Nacional de Fútbol Profesional. "En ese momento uno está con otras pulsaciones... A uno le toca salir a contestar y quizás se me salió la lengua… Después me di cuenta que hubo palabras inapropiadas… Pido disculpas públicas por mis dichos… Uno se entierra con la lengua", lamentó Piersanti al programa radial En La Línea.

Golero

En cuanto a De Olivera, sus declaraciones fueron similares a las del PF, pues igual acusó "mano negra" en la resolución de estos encuentros. Y tal como lo hizo el miembro del cuerpo técnico naranja, el golero también se excusó por sus palabras, calificando el hecho como "un momento de calentura".

"Por ahí cuando uno está con un poco de calentura, con impotencia dice cosas que no están bien. Cuando uno se equivoca tiene que reconocerlo y aceptar que estuvo mal. Por eso quería pedir disculpas públicas a los organizadores de la Copa y a la ANFP", mencionó el argentino tras el duelo empatado sin goles con Barnechea.

A lo que añadió que "yo entré al vestuario y me encontré con un panorama que habíamos dejado todo, que habíamos hecho un gol válido, con un compañero que se desgarra. Son todas cosas que llevan a no pensar", mencionó el guardavalla trasandino.

En la jornada del día viernes pasado, el club envió un comunicado de prensa en el cual le quitó todo el piso a las expresiones de Piersanti, dejando en claro que no las compartía en lo absoluto y que iba a adoptar las medidas disciplinarias que en este caso fueran necesarias.

Además, el documento señalaba que iban a poner en manos del tribunal de disciplina de la ANFP todos los antecedentes del caso, donde quizás la única atenuante a favor de Piersanti es que reclamó airadamente una situación que sí tiene asidero, como fue el gol no cobrado a Cobreloa, el que pudo cambiar la suerte del cuadro minero loíno.

Tanto el preparador físico de Cobreloa, Gerardo Piersanti, como el arquero de la institución minera, Jorge de Olivera, deberán aprovechar su larga estadía en Santiago para acudir hoy hasta el tribunal de penalidades de la ANFP a explicar cada uno de sus dichos, por los cuales arriesgan -según manifestó una fuente del propio tribunal al diario El Mercurio- desde 4 a 50 partidos de suspensión (castigo que correría sólo en Copa Chile).

El problema grandote para el club naranja radica en que esa sanción también puede generar inhabilitación, la que puede ir desde un mes a los tres años (este castigo no distingue competencia). Si el arquero De Olivera recibe una sanción así, Cobreloa podría quedarse por un tiempo -quizás- sin su mejor contratación en esta temporada.

19 horas de hoy ambos deberán presentarse ante el tribunal de disciplina de la ANFP para explicar sus polémicos dichos.