Quienes por años vivimos en la zona, en más de alguna ocasión hemos oído que en Codelco suele existir el amiguismo, compadrazgo o algún otro tipo de acuerdo para favorecer a una persona o a un grupo determinado. Sin necesidad de verificar el comentario o ratificarlo, se asumía como una de las tantas prácticas habituales en un empresa tan grande como la minera estatal.

En la actualidad, a raíz de todos los casos de negociaciones incompatibles, tráfico de influencias, uso de información privilegiada y otras asociadas a la corrupción nos enfrentamos a un escenario en el que este tipo de prácticas en Codelco, existentes o no, son criticadas desde el exterior.

Uno de los que por más tiempo ha levantado este tipo de juicios es el diputado Felipe Ward (Udi), quien ha criticado en muchas ocasiones la forma de resolver las operaciones internas en la estatal. Pero hasta el día de hoy las denuncias no habían sido canalizadas hacia los sectores pertinentes o no habían sido oídas por quienes recibieron los antecedentes.

Pero el parlamentario dio un nuevo paso en sus denuncias y se reunió con el contralor general de la República Jorge Bermúdez, a quien entregó documentación de al menos 10 casos en los que existen visos de irregularidades y que son meritorios de auditorías de parte de Contraloría.

Es en este punto que se hace la separación de los comentarios y verdades a medias que se tejían antaño para dar paso a la denuncia responsable. Aquella que describe la situación, define la irregularidad y da pie a una investigación que puede determinar sanciones o no.

Precisamente el camino tomado por el diputado es el que corresponde. Aquél que se hace con altura de miras, con convicción y con antecedentes, no amparado en conjeturas.

La Contraloría será quien determine si realmente existieron algunos vicios que pueden ser sancionables con medidas internas, intervención del Consejo de Defensa del Estado (CDE) o si todo está enmarcado y apegado a las normativas como debiera ser.

El proceso de reforma de la educación superior se ha desarrollado en un escenario bastante complejo, por la importancia de este tema en nuestra sociedad y por la necesidad de avanzar a dar solución a una de las demandas más sentidas por parte de los jóvenes y de la ciudadanía en general. No obstante a contar de este año y gracias al esfuerzo desplegado por el gobierno de la Presidenta Bachelet, cumpliendo con su compromiso de campaña, seremos testigos de cómo miles de estudiantes chilenos que antes debían endeudarse o simplemente no tenían la posibilidad de estudiar, puedan hacerlo de forma gratuita en Universidades, Centros de Formación Técnica e Institutos Profesionales que se han unido al proceso de gratuidad.

Según cifras entregadas por 25 de universidades adscritas al Sistema Único de Admisión (SUA), respecto de los cerca de 60 mil estudiantes seleccionados en los planteles que tendrán gratuidad, más de 23 mil (25%) ya tienen certeza de que podrán acceder al beneficio este año. Esto de acuerdo a los resultados de las postulaciones vía PSU, lo que se traduce en un gran avance para nuestro país en este ámbito.

Ahora, obviamente lo más importante es que todos estos estudiantes podrán cursar carreras de pregrado o de formación profesional de manera gratuita, pero no hay que olvidar que además dicha enseñanza será de calidad, pues uno de los requisitos que deben cumplir todas las casas de estudio superior, es que deben estar acreditadas tanto la institución, como las carreras que impartan, lo que garantiza calidad, profesionalismo y excelencia para quienes accedan a este nuevo sistema de financiamiento.

Durante este año seguiremos legislando para avanzar hacia la universalidad en gratuidad y en calidad de la Educación Superior, y también respecto de la enseñanza en los niveles primarios, de manera de poder dotar a nuestras futuras generaciones de las herramientas necesarias para desempeñarse en distintas áreas, en nuestro país y en el extranjero, sin discriminaciones ni arbitrariedades relacionadas con la falta de recursos para el acceso a una Educación de alto nivel.

Marcos Espinosa Monardes,

Diputado