El Presidente Mauricio Macri admite que "va a llevar un tiempo" bajar la inflación en Argentina
ESCENARIO. El Mandatario se comprometió a trabajar en la inflación, fenómeno que según él "lleva años".
El Presidente argentino, Mauricio Macri, advirtió ayer que el país no puede convivir con la inflación si quiere crecer, aunque admitió que "va a llevar un tiempo bajarla gradualmente", tras tomar juramento al titular de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, Esteban Greco.
Macri destacó que el organismo trabajará "para que se potencien las medianas empresas y se eviten los monopolios y oligopolios con los que terminamos perdiendo trabajo para los argentinos y las cosas nos cuesten más caro".
"Como Gobierno y Estado iremos trabajando sobre la reducción sistemática de la inflación. Lleva años este fenómeno y nos va a llevar un tiempo bajarla gradualmente", dijo el Mandatario en la sede del Gobierno argentino, donde poco antes encabezó una reunión de Gabinete.
El Presidente acusó al anterior Ejecutivo, encabezado por Cristina Fernández, de la elevada inflación que arrastra Argentina desde hace años, de las más altas del continente, con alzas interanuales por encima del 25%.
"Este proceso de inflaciones altas ha afectado nuestra capacidad de crecimiento", sostuvo, antes de reiterar la voluntad de su Gobierno de corregir el rumbo.
Creciente malestar
Macri hizo estas declaraciones en momentos en que crece el malestar popular por la sostenida alza de los precios y la demora en contar con estadísticas oficiales.
La inflación registró una aceleración desde fines de noviembre. En enero pasado alcanzó 3,6%, según un promedio de mediciones privadas difundidas por legisladores opositores en el Congreso.