¿Cuántos más?
Día a día decenas de estudiantes cruzan, sin protección alguna y exponiendo su vida, la carretera para poder llegar a sus hogares como también a su establecimiento educacional.
Han pasado años desde la primera protesta de los habitantes del Peuco Maratón para que el alcalde instalara una pasarela para todas aquellas personas que se ven obligadas a cruzar la carretera para poder llegar a su destino y hasta el momento no se ha entregado solución alguna.
Hace pocas horas nos enteramos del lamentable accidente donde se ven involucrados dos estudiantes quienes se dirigían a sus hogares luego de una jornada escolar siendo uno de ellos trasladado a la ciudad de Santiago debido a la gravedad de sus lesiones.
Es necesario y de manera urgente que el alcalde tome cartas en el asunto para atender la solicitud de la comunidad y así evitar que se vuelvan a repetir estos lamentables sucesos que pueden perfectamente terminar con un resultado inclusive peor.
Francisco Belmar Añasco, ex Alumno Colegio Chuquicamata
Pasarela
Luego del lamentable accidente de dos niños en el cruce peatonal de Av. Circunvalación, frente de la población Peuco Maratón, surgen algunas reflexiones que me gustaría compartir.
Nuestra ciudad se encuentra en constante crecimiento, pero lamentablemente es un crecimiento no planificado, que deviene en una fragmentación urbana, que da lugar a múltiples problemas. Uno de ellos es la escasez de locomoción colectiva en muchos sectores de Calama, la falta de una adecuada señalética vial, y por supuesto, el consecuente riesgo de accidentes de tránsito para quienes viven en estos sectores.
La necesidad de pasarelas peatonales debiera ser parte de una planificación urbana, de saber cómo queremos ver y cómo queremos vivir Calama. En este caso particular, esta infraestructura no sólo está llamada a unir dos áreas separadas, sino que es una forma de generar ciudad. No debemos olvidar que el propósito social de los proyectos de infraestructura es mejorar la calidad de vida de las personas.
Este problema se arrastra desde hace más de 9 años, al construirse la población Peuco Maratón y no contemplar estas pasarelas. Frente a esto sólo se han implementado barreras blandas, que claramente no evitan la ocurrencia de accidentes.
Tengo entendido que el diagnóstico del problema es compartido por todos, pero ni el Ministerio, ni la Municipalidad, ni las empresas de la zona han ofrecido datos precisos sobre cuándo o cómo comenzarán las obras. Y mientras, el tránsito de vecinos (entre ellos muchos niños) en este tramo reviste una gran peligrosidad. En este escenario, me parece urgente participar de la solución, ser parte del analizar, el hacer y el decidir sobre qué es lo que queremos como ciudad y cómo protegeremos a quienes más valoramos, nuestros niños.
Me parece que en este escenario es exigible al menos una pasarela mecano mientras no se construya una solución definitiva.
¿Cuántos accidentes más tendremos que lamentar?
Macarena Rodríguez Pareja
Piramidales
A propósito de las piramidales, sus consecuencias son: "El penseque y el creique son causas del embarreque".
Renato Norero
Femicidios
Los femicidios, asesinatos de mujeres por razones de género, son la manifestación más grave de discriminación y violencia contra ellas. El tipo penal en Chile sólo contempla los femicidios íntimos (45 mujeres fueron asesinadas el año 2015), asesinatos a manos de sus parejas o exparejas, por lo que las cifras serían aún peores.
En general, el tratamiento periodístico ante casos de femicidio se relaciona con crímenes pasionales, cuando no lo son, centradas en las razones que llevaron al victimario a cometer el delito o en externalidades que poco aportan, como lo que piensan los/las vecinos/as.
Esto no sólo justifica la violencia contra las mujeres, sino que además la fomenta, promueve la revictimización, perpetúan estereotipos machistas, normaliza la violencia, minimiza la real magnitud del problema y aumenta los niveles de tolerancia.
La solución conlleva muchas aristas. Desde mi rol como comunicadora hago hincapié en la necesidad de contar con más profesionales sensibilizados y conscientes de que la comunicación es un potente vehículo movilizador y generador de cambios.
No se confunda, esto no es un atentado a la libertad de expresión, al contrario, es un llamado a que los medios utilicen todo su talento y creatividad en la generación de contenido responsable y consciente. Estoy convencida que es posible. ¿Podrán los medios de comunicación ser creativos sin fomentar violencia contra las mujeres
Javiera Sandoval Quiroz